Los teléfonos móviles se han convertido en objetos casi imprescindibles para cualquier viaje, ya que se trata de dispositivos con los que se pueden realizar compras y reservas en hospedajes, ver mapas para definir recorridos en lugares desconocidos, tomar fotografías o acceder a información necesaria de manera rápida, entre otras funciones. No obstante, también están construidos con materiales frágiles que los hacen vulnerables a la exposición al agua, a las altas temperaturas o frente a caídas.

Es por esto que existen distintas recomendaciones para tener en cuenta a la hora de cuidar nuestros smartphones mientras estamos de viaje, independientemente del destino elegido.

Recomendaciones para cuidar el celular en vacaciones

El funcionamiento de los teléfonos móviles se da de manera óptima cuando el rango de temperatura es ideal, es decir, que no sean ni muy bajas ni muy altas. Esto se debe a que las condiciones extremas podrían afectar la batería y otros componentes internos. Para evitar esto lo mejor es usar el celular sin ningún tipo de funda cuando la temperatura sea elevada.

Otro punto a considerar es el de contar con un kit de limpieza que sirva para mantener el dispositivo en condiciones cuando se viaja al mar o a sitios en los que corre riesgo de ensuciarse. Un kit ideal debería tener: paños de microfibra, uno para mojar y el otro para secar; un líquido de limpieza de pantallas; y un cepillo de cerdas suaves.

Es recomendable contar con un kit de limpieza para mantener el celular en condiciones.

“Un cepillo de cerdas suaves, con el fin de pasarlos por los orificios de carga, micrófono y sonido siempre en sentido exterior para sacar suciedad. Esta rutina con el kit es recomendable realizarla dos veces al día durante las vacaciones, no va a tardar más de 5 minutos y el celular se mantendrá en excelentes condiciones”, indican desde la marca Realme.

A diferencia de lo que ocurre en los casos de altas temperaturas, en general lo que se recomienda es usar fundas para los teléfonos móviles para protegerlos contra rayaduras, golpes y caídas.

También es importante que el celular tenga un vidrio protector para cuidar la pantalla. Otras opciones son las fundas con tapones para los puertos de carga o las cámaras, que sirven para complementar el cuidado general.

Para evitar caídas al agua, lo mejor es evitar tomar fotos con el celular cerca de la orilla del mar.

Aunque muchos de los dispositivos de gama media y alta cuentan con certificaciones que los protegen ante caídas al agua hasta cierta profundidad, es mejor evitar el riesgo de daño dejándolos lejos de lugares con agua como piletas o el mar.

En caso de que el teléfono caiga al agua, las recomendaciones son apagarlo inmediatamente, retirar la tarjeta SIM y la memoria microSD, en caso de que la tenga. Luego se debe secar el móvil con un paño o con un secador en aire frío.

Las redes públicas de WiFi son las más expuestas frente a ataques cibernéticos.

En cuanto a las ocasiones en las que se conecta el teléfono a la corriente para cargarlo, la recomendación es evitar cables o dispositivos no originales, además de no ubicarlo en lugares donde su temperatura pueda subir y dañar la batería.

Ante la necesidad de estar conectado a internet, muchos optan por usar las redes de los hoteles, playas y restaurantes. Y aunque son una opción viable, lo mejor es evitarlas y, sobre todo, no usarlas para acceder a cuentas bancarias o cualquier otro servicio de carácter sensible, ya que estas redes están más expuestas a los ataques de ciberdelincuentes.