Steve Jobs no solo es recordado como el responsable de los productos más icónicos de Apple, sino que a una década de su muerte sigue siendo una referencia de liderazgo, creatividad y espíritu emprendedor. "Tengan hambre, sean locos", les había dicho a los jóvenes estudiantes de la Universidad de Stanford, palabras que se transformaron en una suerte de legado para las nuevas generaciones.

Además, el empresario hizo en varias oportunidades declaraciones sobre el avance de la tecnología y cómo iban a cambiar los dispositivos con el correr de los años. Y si bien en muchas ocasiones dio en la tecla, en otras quedó demostrado que estuvo errado.

Algunas de sus predicciones que fueron rebatidas por el tiempo son:

La preferencia por el software


Jobs auguró que, a medida que la tecnología avanzara, las áreas de software y aplicaciones serían las que concentrarían la mayor parte de las inversiones.

Sin embargo, hoy la propia Apple destina millones de dólares a las mejoras de los componentes de sus dispositivos con el fin de incrementar su rendimiento. En definitiva, las empresas tecnológicas trabajan dedicándole tiempo y recursos a ambos aspectos.

La elección de John Sculley

Jobs junto a John Sculley.


Apple necesitaba un CEO con experiencia y, tras varias entrevistas, Jobs eligió personalmente a John Sculley (en ese entonces presidente en PepsiCo) para que tomara las riendas de la compañía.

Jobs estaba convencido de que Sculley era perfecto para el cargo, y ambos entablaron una amistad muy cercana que durante los primeros meses.

Sin embargo, en 1985 y tras varias discrepancias entre ellos (en este caso, sobre bajar o no el precio de los Mac para aumentar las ventas) Sculley acabó forzando la dimisión de Jobs, que vendió todas sus acciones de Apple menos una.

En su biografía personal, publicada en 2011, Jobs señaló que "Sculley destruyó Apple" porque su única prioridad era hacer dinero, sin importar la calidad de los productos.

La importancia de Internet


Aunque Jobs entendió muy pronto que la sociedad acabaría estando conectada, minimizó el impacto que tendría internet en la vida de las personas.

Curiosamente, el día que se cumplieron 10 años de la muerte de Jobs coincidió con un evento que expuso la dependencia que mantenemos actualmente de la tecnología: el apagón global de WhatsApp, Facebook e Instagram.

La música y el modelo de suscripción

La plataforma iTunes fue lanzada en 2001.


Steve Jobs presentaba en 2003 el nuevo servicio iTunes Music Store, que permitía al usuario adquirir canciones y transferirlas fácilmente a su dispositivo iPod.

Pese a adentrarse en este terreno, el genio de Apple no estaba demasiado convencido de que el modelo de negocio basado en pagar por escuchar música digitalmente alcanzara el éxito.

Como en los ejemplos anteriores, el paso de los años demostró lo contrario: Spotify, una de las plataformas de música en streaming más populares, alcanzó el pasado junio los 365 millones de usuarios mensuales activos, aunque es cierto que la compañía tecnológica sueca tardó muchos años en obtener beneficios: no ganó dinero hasta 2019.

El tamaño de los celulares

El iPhone de primera generación tenía una pantalla de 3,5 pulgadas.


El cofundador de Apple creía que la funcionalidad de los smartphones se perdía si sobrepasaban las cinco pulgadas de tamaño.

Sin embargo, la propia Apple sacó al mercado el iPhone 6 Plus con pantalla de 5,5 pulgadas en 2014, para competir con otros modelos que también sobrepasaban las indicaciones de Jobs. El iPhone 13, el modelo más reciente de Apple, es de 6,1 pulgadas y su versión Mini es de 5,4.