Lejos estaba en el imaginario una navidad en medio de una pandemia, con reuniones bajo estrictos protocolos para evitar la propagación de un virus. Sin embargo, el 2020 sorprendió y, a días de vivir unas fiestas diferentes, el emblemático arbolito navideño no puede faltar.

Distintos estilos para el armado se hacen presentes, partiendo del estilo de árbol que se elija decorar: uno real o artificial y, dentro de este último, la opción de los clásicos simil-reales o las nuevas opciones en madera.

Estilo clásico: En este caso, los elementos para decorar el árbol respetan los clásicos colores navideños: rojo y dorado. Lazos, guirnaldas y la estrella de la punta pueden ser dorados metálicos para otorgar un brillo extra al árbol.

Estilo frío: Emulando la navidad del hemisferio norte, pueden optarse por combinaciones entre azul y plateado, dando un toque exótico con brillos en tono blanco. Si se opta por el minimalismo, los adornos deberían ser blancos o plateados con gran presencia del color azul.

Estilo nórdico o escandinavo: Con la calma como protagonista, la tendencia deco también se traslada al árbol navideño. Madera, color blanco y objetos artesanales son la clave para este estilo, con guirnaldas que se vuelcan más hacia lo plateado.

Estilo rústico: Este estilo es el que mejor se adapta a interiores. Lo rústico y campestre queda perfecto en árboles artesanales, decorados con piñas y ramas. Se pueden utilizar objetos reciclados para recrear los adornos navideños.