Mientras que el nude y los looks livianos, naturales y poco cargados se siguen usando en materia de maquillaje, hay una tendencia que está dando que hablar y es la que tiene que ver con la exageración de los colores.

Esta propuesta está basada en lograr un acabado notablemente artificial al que se llega por medio de técnicas que antes estaban reservadas sólo para ámbitos artísticos -como el contouring, el strobing, los smokey eyes y el cute crease-. 

Según publica lanacion.com.ar, para el artista del make-up, Matías Nazareno, colaborador de creadores y fotógrafos, como Juan Gatti, Pablo Ramírez y Alí Madhaví, y aliado creativo de directores teatrales, como Alfredo Arias en París, el lado B del fenómeno de la cara lavada está alimentado por un encuentro de culturas impensadas.

Dos de las principales inspiraciones de esta nueva artificialidad son el mundo de las drag queens y el de la cultura árabe, atravesadas por una variable de la que nadie se salva en esta era: el show off.

Quienes llevan esta tendencia a la máxima expresión son las llamadas bio queens: jóvenes mujeres que expresan su fascinación por el mundo de las drag queen, buscando convertirse ellas mismas en drags, aunque biológicamente sean mujeres (de ahí su nombre).

A nivel internacional, las hermanas Kardashian son representantes de esta estética, pero quien la lleva a otro nivel es la cantante Nicky Minaj, cuyo lema podría sintetizar su postura y propuesta: "Bella está bien, pero original es mejor".

The girl with kaleidoscope ��. #MACBackstage at @christiancowan #AW17. Show keyed by @isamayaffrench. #NYFW

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