Como cada vez que aumenta el precio de los combustibles, los rosarinos formaron largas filas en estaciones de servicio para cargar el tanque antes de sentir un mayor impacto en el bolsillo.

Un recorrido del programa Telenoche Rosario (El Tres) encontró que muchos automovilistas esperaban en los surtidores de Avellaneda y Córdoba ante el incremento que comenzará a regir en el primer día hábil de marzo.

Se trata de una nueva suba que corresponde a la decisión del gobierno nacional de descongelar el impuesto a los combustibles, algo que se va a realizar en tres etapas. En la primera, se estima que el incremento podría rondar el 4% para la nafta y el 3% para el gasoil.

De acuerdo a los argumentos del Decreto 107/2023 publicado en el Boletín Oficial, la actualización responde a normalizar las subas postergadas por el gobierno anterior “correspondientes al tercer y cuarto trimestres calendario del año 2021, al primer, segundo, tercer y cuarto trimestres calendario del año 2022 y al primer, segundo y tercer trimestres calendario del año 2023”.

“Resulta razonable diferir parcialmente sus efectos, así como los de la actualización correspondiente al cuarto trimestre calendario del año 2023, para la nafta sin plomo, la nafta virgen y el gasoil, de manera tal que los incrementos derivados de todas las actualizaciones atinentes a dicho año surtan efectos conforme a un cronograma de gradualidad”, detallaron.

De esta manera, las subas a aplicarse serán en marzo, abril y mayo. Se estima que todas rondarán una suba similar. Cabe destacar que la suba impositiva a los combustibles podría no repercutir de forma directa al valor que pagan los clientes ya que, cada estacionero puede definir si lo absorbe o lo traslada.