A los 10 años debutó como actor interpretando personajes de ficción como el Llanero Solitario y Tarzán. El teatro de los comienzos no fue aquel mítico Broadway de los 60 sino el modesto patio de la casa paterna y la entrada no tenía un valor en dinero: la moneda de cambio era una modesta root cola.
Esos son los primeros recuerdos que tiene el actor y director rosarino José Alberto Berlén de lo que hasta hoy sigue siendo su gran pasión: el teatro. Su momento decisivo le llegó a los 24 años. Apuntalado por su ex mujer, Berlén tomó la decisión de dejar su trabajo como empleado de comercio en la tienda Tops para largarse de lleno a vivir de la actuación.
Si bien hizo de todo, lo que identifica a Berlén es la comedia picaresca, donde dice sentirse más cómodo. Esto y mucho más está contado por el propio protagonista en un mano a mano junto al periodista Juan Junco para Mesa de Diálogo, el espacio de encuentro de Rosario3.com
Aquí los principales fragmentos de la entrevista:
El primer contacto con la actuación
El trabajo de director y el grotesco cómo genero predilecto
Una revista donde siempre se respeto a la mujer
"Del humor de hoy no me hace reír nadie. Creo que me quedé en el tiempo"
