Con la llegada del calor se generó una nueva polémica entre usuarios y choferes del transporte público de pasajeros, que se suma a los problemas que hay para poder utilizar el servicio. 

Por protocolo sanitario, las unidades deben garantizar la ventilación cruzada para reducir las posibilidades de contagio, pero en muchos casos las ventanillas están cerradas porque los conductores encienden el aire acondicionado y no quieren que se pierda el frío.

En el caso de los colectivos, la polémica surge cuando alguno de los pasajeros recuerda el protocolo sanitario y pide abrir la primera y última ventanilla opuesta. En tanto que en los taxis el problema se da a la inversa ya que muchos pasajeros piden cerrar vidrios y exigen a los choferes que enciendan el aire acondicionado.

Este tema fue planteado en la mesa de A Diario (Radio 2) y despertó el interés de los oyentes que rápidamente dieron sus posturas y contaron situaciones que vivieron en los últimos días, tanto en colectivos como en taxis. en algunos casos con ventanillas abiertas y sin aire y en otros a la inversa.

Lo cierto es que los protocolos sanitarios vigentes destacan que deben convivir ambas situaciones.

En colectivos, la obligatoriedad de abrir la primera ventana derecha y la última del lado opuesto, sigue vigente. Con eso se garantiza el recambio de aire de las unidades, pero no impide que el aire acondicionado esté prendido para que la temperatura dentro del vehículo se mantenga un poco más baja.

Para los taxistas, la disposición es similar. En un principio, durante el pico más grave de la pandemia, el acuerdo era que las ventanillas se mantengan abiertas en su totalidad y el aire apagado. 

Con las flexibilizaciones y la mejora epidemiológica eso se fue adaptando. Pero el último crecimiento de casos volvió a poner el foco de los sanitaristas en los protocolos que, por el momento, definieron que las ventanillas se mantengan semiabiertas y el aire acondicionado prendido.

En tanto que el plástico divisor que utilizan los taxistas para separarse de los pasajeros, desde el municipio explicaron que no es una medida obligatoria y que depende de cada uno de los conductores si lo utilizan o no.