A más de siete meses desde que se declaró la pandemia, 137 millones de niños, niñas y adolescentes de América Latina y el Caribe aún no regresaron a la escuela. Según un informe de Unicef, en Latinoamérica se perdieron cuatro veces más días de clases que en el resto del mundo. 

América Latina es una de las regiones más golpeadas por el covid-19, con más de 11,6 millones de casos y más de 400.000 muertes, según los datos recientes. Esto genera que la gran mayoría de las aulas sigan cerradas, y que en más de un tercio de todos los países de América Latina y el Caribe aún no haya una fecha para la reapertura de las escuelas.

El coronavirus podría sacar de la escuela hasta 3 millones de niños más en América Latina y el Caribe.

Y el problema no tiene que ver solo con el regreso a clases, sino también con el impacto educativo marcado por la brecha entre las familias ricas y pobres de la región. Según el informe, "el porcentaje de niños, niñas y adolescentes que no reciben ninguna forma de educación en la región se ha disparado drásticamente, del 4 al 18 por ciento en los últimos meses". En este sentido, el acceso a la tecnología resulta un factor determinante.  

“En América Latina y el Caribe, es posible que millones de los estudiantes más vulnerables no regresen a la escuela”, dijo Bernt Aasen, director regional interino de Unicef para América Latina y el Caribe.

La reapertura de las escuelas debe ponerse como prioridad.

En el informe también se alertó que los avances en la educación obtenidos durante las últimas décadas "corren ahora el riesgo de revertirse", y que "el impacto económico de esta crisis educativa se dejará sentir en los próximos años". 

Es por eso que a pesar de las diversas situaciones epidemiológicas que se dan en cada país, se establece que "la reapertura de las escuelas debe ser una prioridad para los gobiernos".