Prestadores de diálisis de todo el país dispusieron medidas especiales para garantizar atención a pacientes dializados en el marco de la emergencia sanitaria por coronavirus.

Referentes del sector acordaron un protocolo para la atención de casos sospechosos de covid-19 y de esa manera evitar contagio al personal médico y poder realizar la prestación.

Entre otras cosas, se definió que los pacientes que se dializan, en caso de contraer coronavirus o ser casos sospechosos, deberán ser dializados en los lugares de internación dispuestos por el Estado para pacientes con el virus.

En el documento se dejan establecidas las normativas que adoptarán los centros prestadores de diálisis de todo el país para manejar a los pacientes dializados en el contexto de la pandemia por covid-19.

Se definieron medidas para pacientes internados y dializados en internación

1. Pacientes con insuficiencia renal crónica en plan de diálisis, confirmado:

En el documento de OMS del 17 de marzo se detalla de manera clara cuál debe ser el procedimiento con los pacientes previamente sanos que contraen la enfermedad y desarrollan un cuadro leve. En dicho artículo se establece que, ante la imposibilidad de internación para aislamiento, el mismo debe aislarse en su casa hasta la normalización del cuadro con la cura infectológica, siempre y cuando el paciente no tenga condiciones preexistentes que determinen la necesidad de aislamiento en internación, entre las que se cuentan la insuficiencia renal.

De tal manera, no existe razón para movilizar de la internación, independientemente de su condición clínica, a un paciente ya confirmado que podría favorecer la difusión de la enfermedad durante su traslado y en el centro en donde recibe tratamiento habitual.

El paciente estará en condiciones de regresar a dializarse en su centro una vez que la condición infectológica lo permita, es decir, una vez que se determine fehacientemente que ha superado la infección y ya no es contagioso.

2. Pacientes con insuficiencia renal crónica en plan de diálisis, sospechosos:

Definidos según las características descriptas en el documento del Ministerio de Salud de la Nación, estos pacientes deberán estar en aislamiento en internación y recibir su tratamiento dialítico en internación hasta tanto se determine su condición frente a Covid-19. Sólo se lo recibirá en su centro de diálisis de origen cuando esté fehacientemente probada su condición de no infectado con el virus mediante prueba de RT PCR.

3. Paciente con insuficiencia renal crónica en plan de diálisis, contacto estrecho:

Según el informe del Ministerio de Salud de la Nación del día 16 de abril, la cantidad de infectados en el país asciende a 2571 individuos, de los cuales el 35.3% corresponden a contactos estrechos. De esta manera, los contactos estrechos son a la fecha el grupo más numerosos con enfermedad confirmada.
Teniendo en cuenta la condición de los pacientes renales en diálisis, la determinación de que alguno de ellos resulte contacto estrecho, debe obligar a su aislamiento en internación y a la realización inmediata de RT PCR, al igual que en el caso del paciente sospechoso, a fin de determinar si ha sido contagiado y resulta positivo para Covid-19. En el caso de resultar negativo, estará en condiciones de retornar a su centro de origen para continuar su tratamiento, preferiblemente en situación de aislamiento.

Los hospitales deberán disponer de áreas específicas para alojar a este grupo de pacientes y permitir que se realice su tratamiento in situ. Es imperativo señalar que no podrán ser alojados en el mismo lugar, debiendo designarse áreas para los tres tipos de pacientes referidos con anterioridad. Asimismo, se deberán tomar los recaudos pertinentes para efectuar las pruebas de detección mediante PCR, con el objeto de realizar diagnóstico precoz y eventualmente devolver a los pacientes negativos a sus centros de origen. Los pacientes internados se dializarán con el mismo personal siempre, asegurando la minimización de la difusión de la enfermedad.

En relación al personal sanitario, aquellos individuos que hubieran estado en contacto con cualquiera de los pacientes referidos previamente, deberán ser puestos en cuarentena e hisopados para determinar su condición infectológica de manera que si resultaran negativos, puedan continuar con las tareas habituales y de este modo, posibilitar el normal funcionamiento de los centros.