Para el Foro Regional Rosario, entidad local con el foco en el desarrollo económico, social y cultural de la región, los resultados de la encuesta sobre inseguridad realizada por Rosario3 junto a MEC Consultores, “ponen de manifiesto el humor social que provoca vivir en una ciudad con índices de criminalidad” que han crecido muy por encima de otras ciudades con niveles de pobreza y desocupación similares.

No solo eso, Selva Raggio, directora ejecutiva del Foro, advirtió que por un lado la inseguridad afecta principalmente a los sectores más carenciados y ha llegado a un punto en el que no solo deteriora, como surge de la encuesta, la calidad de vida cotidiana de los rosarinos sino que además complica “el desarrollo de la ciudad como tal”.

Desde hace tiempo el Foro ha puesto el foco en la seguridad como uno de los temas principales de análisis y debate. El sondeo de opinión de Rosario3 y MEC Consultores confirma aristas del problema que ya estaban en esos análisis, en los que sobresale “la falta de respuesta del Estado, tanto de las fuerzas de seguridad como, en otros casos, de la Justicia; la falta de confianza en esas fuerzas debido a la baja capacitación y herramientas para la resolución de conflictos y de la complicidad policial que existe en muchos casos.  Estos, forman el combo perfecto y absolutamente comprensible de la sensación de constante vulnerabilidad que tiene casi el 100% de la población de Rosario”, explica Raggio. 

Que también apuntó a “otras dificultades que potencian ese sentimiento como la desorganización del transporte público o del servicio de taxis que deja a los ciudadanos a merced de la delincuencia, cuando no se puede tener certeza del horario en que pasará el ómnibus o no se puede obtener un servicio de taxi en determinados horarios y/o situaciones. Esto se agrava cuando además y, en determinados barrios, las condiciones de infraestructura como las luminarias y el estado de las calles, en muchos casos inaccesibles, dejan a las y los vecino/as en completo estado de indefensión”. 

principalmente a los sectores más carenciados, quienes en la encuesta manifiestan con certeza que son los más golpeados. Son verdaderamente quienes sufren a diario situaciones reales de inseguridad dada la mayor ausencia del Estado y dada su imposibilidad recursiva para protegerse. En muchas zonas periféricas de nuestra ciudad, los vecinos son rehenes cotidianos del delito. Y lo que es peor, estigmatizados y por ende limitados hasta para conseguir un trabajo digno”, señala la directiva del Foro Regional Rosario.

De lo que se trata, finalmente, es de un círculo vicioso, porque “la problemática ha avanzado y no solo afecta a la población en su calidad de vida cotidiana, sino también en el desarrollo de la ciudad como tal”. La padecen empresas de todos los rubros, que deben invertir en la incorporación de sistemas de seguridad y vigilancia, como sus trabajadores y consumidores, que además de tener que afrontar los riesgos de sufrir un delito pagan más por los productos debido a que los mayores costos que generan los sistemas de seguridad se trasladan a precios. 

No solo eso: según el Foro el incremento de los costos, que incluye también “las primas de seguros por las lesiones sufridas in itinere por los trabajadores”, afecta también “la radicación de muchas empresas o provoca mudanzas de las existentes a ciudades del área metropolitana o de otras provincias, donde las condiciones sean más favorables en función de esta problemática. Lo que acaba también provocando mayores índices de desocupación y consecuente pobreza que, en muchos casos, eleva la criminalidad”.

Los comercios deben afrontar en muchos casos también el “flagelo” de la extorsión, otro motivo de cierre o traslado de firmas. 

“Todos estos factores debilitan el desarrollo de la ciudad y por tanto aumenta la criminalidad, debilitan la credibilidad, aumentando el temor por desprotección y como estamos viendo en muchos países de Latinoamérica, demandando a la política legislaciones proclives a la liberación de las armas para defensa personal”, advierte Raggio. 

Que remarca: “Tenemos un Estado, en todos sus niveles y poderes, ausente por acción u omisión, desconectado de la función para lo que ha sido creado en su génesis: administrar la educación, la Justicia, la seguridad y la salud”.

La directiva del Foro Regional Rosario también cuestiona que “la seguridad en los tres niveles de gobierno, carece de proyectos y recursos humanos y tecnológicos suficientes y equipos con la formación necesaria para administrar la gobernanza de la seguridad”. 

“La narcocriminalidad, en todas sus ramificaciones delictivas, es absolutamente transversal y por tanto, como el término lo indica, tiene cooptadas voluntades en todos los ámbitos”, remarca.

Algo que se ve reflejado en cuál creen quienes participaron de la encuesta que es uno de los puntos fundamentales para revertir la situación: atacar la corrupción. “Es responsabilidad de cada espacio limpiar su propia casa y exigir, de quienes tienen el poder/deber otorgado por las leyes y el voto popular, el compromiso de consensuar medidas económicas y de desarrollo social de verdadera y digna inclusión social y políticas públicas de seguridad de acuerdo a sus competencias (local, provincial y nacional), sin más dilaciones. Estamos en un momento bisagra para seguir el camino de destrucción como muchos países de Latinoamérica y el Caribe, o para diferenciarnos y mostrar que podemos revertir esta situación que no dejará de profundizarse si no se toma cartas en el asunto y se dejan las mezquindades y desinteligencias de lado”, enfatiza Raggio.