Una inesperada lluvia empezó a caer en la mañana de este sábado y trajo un alivio temporario a la región. Es que, tras varias jornadas de calor intenso, el agua se hizo presente desde temprano y eso permite ilusionarse con que la jornada no llegará a los 34 grados que se anticipaban.
De acuerdo al reporte del Servicio Meteorológico Nacional (SMN), a primera hora del día la temperatura se ubicaba por los 23.5 grados, la humedad en el 64 por ciento y la presión en 1008.2 hPa. Además el viento sopla del este a siete kilómetros en la hora y la visibilidad está reducida a 10 km.
Para la tarde del sábado el SMN sostiene aún una máxima que se ubica en los 33ºC por lo que habrá que esperar para saber si el frente de tormenta persiste o si se diluye rápidamente y el sol vuelve a hacer de las suyas.
Independientemente de eso, se sostienen los anuncios de precipitaciones para el domingo y tanto lunes como martes de la semana que viene habrá unos días un poco más frescos que rápidamente serán interrumpidos por otra extenuante seguidilla de días calurosos que empezará el miércoles.
