En la previa de la Nochebuena, el arzobispo de Rosario, monseñor Eduardo Martín, hizo este jueves un balance del 2020, atravesado por la pandemia de coronavirus y ahora, hacia el final, con la posibilidad de la legalización del aborto que se votará el martes que viene por la tarde.

“Éste fue un año muy difícil, que ha trastocado proyectos y trajo mucho sufrimiento”, evaluó el arzobispo rosarino en contacto con el programa A diario (Radio 2).

Pero destacó que con la Navidad, para los católicos, se enciende una “luz de esperanza” porque Navidad significa nacimiento, volver a empezar.

Con todo, lamentó que el cierre de este año esté atravesado por la discusión por la legalización del aborto que, de acuerdo a sus creencias, viene a contradecir justamente a la Navidad. “Es una ley inoportuna, Navidad es nacimiento, vida”, reiteró.

Convocó a los católicos que estén en contra del proyecto de interrupción legal del embarazo a una jornada de ayuno y oración el lunes que viene, para “iluminar” a los senadores.