El hombre detenido bajo la acusación de haber asesinado a puñaladas a su expareja delante de sus hijos de 5 y 3 años en una vivienda de la localidad bonaerense de Marcos Paz fue encontrado muerto este sábado a la tarde en el calabozo donde estaba alojado, y se investiga si se envenenó antes de ser capturado, informaron fuentes judiciales.

Se trata de Carlos Soruco Fernández (32), de nacionalidad boliviana, quien permanecía detenido en la comisaría 1° de Mercedes a la espera de ser indagado por el femicidio de Vanesa Carreño (29), asesinada de 13 puñaladas, según reveló la autopsia realizada esta tarde.

Voceros judiciales informaron que el hallazgo se produjo en una de las celdas de la mencionada seccional, donde fue encontrado Soruco Fernández tirado boca arriba y sin signos vitales.

El hombre había sido trasladado en la mañana desde el destacamento de Mariano Acosta hacia la comisaría de Mercedes, donde permanecería alojado hasta ser indagado por el fiscal el fiscal Pedro Illanes, a cargo de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 3 del Departamento Judicial Mercedes, quien le imputaba el delito de “homicidio agravado por el vínculo y por ser cometido mediando violencia de género”, que prevé una pena de prisión perpetua.

Fuentes judiciales informaron que el acusado manifestó sentirse descompuesto, tras lo cual fue atendido por personal médico y luego regresó al calabozo, en el cual estaba solo.

De acuerdo con el médico legista que constató la muerte de Soruco Fernández y revisó el cadáver, no tenía signos de violencia, y el fiscal Illanes ordenó que se practique la operación de autopsia.

Es que los investigadores sospechan que el imputado puede haber ingerido algún tipo de veneno antes de ser capturado por vecinos en un campo de la localidad bonaerense de Mariano Acosta, partido de Merlo.

El hecho se registró el viernes cerca de las 11.30 en El Malacara y Reilly, del barrio Santa Catalina, en jurisdicción de Marcos Paz, 48 kilómetros al oeste de la Ciudad de Buenos Aires, donde vivía la víctima.

Fuentes judiciales y policiales informaron que Carreño se había separado de su expareja hacía tres meses y el hombre concurrió a la vivienda.

En ese marco, Carreño recibió varias puñaladas en su cuerpo que le causaron la muerte en el lugar, mientras que el agresor escapó y arrojó el arma homicida al techo de la vivienda, que luego fue encontrada por los peritos que trabajaron en la escena del crimen.

"El exmarido le traía zapatillas a los nenes de 5 y 3 años y la apuñaló, los nenes presenciaron ese momento horrible viendo cómo mataban a su mamá", publicaron en redes sociales conocidos de la víctima.

Vecinos que escucharon gritos alertaron al 911 y los efectivos comprobaron que la joven estaba fallecida por heridas de arma blanca.

Tras el crimen, personal policial inició un operativo para detener al sospechoso, quien finalmente el viernes a la tarde fue localizado por vecinos en un campo de Mariano Acosta.

Luego de ser reducido, Soruco Fernández fue aprehendido por los efectivos y trasladado al destacamento de Mariano Acosta.