Ambientalistas y científicos detectaron una creciente contaminación de los océanos por la gran demanda de elementos de protección contra la pandemia del coronavirus utilizados por la sociedad.

A lo anterior se les unen los desechos que provocan los delivery y restaurantes, como envases de plástico, bolsas, cubiertos, vasos. Objetos que se usan para evitar que, por una mala higiene, se pueda propagar el virus que ya ha provocado la muerte de más de 900 mil personas en el mundo.

“Era predecible al ver la cantidad de máscaras y guantes tirados directamente a las alcantarillas”, publica la ONG en Facebook, junto a varias imágenes de los desechos anti-covid, bajo del mar.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda tirar las mascarillas en un contenedor de basura “adecuado” inmediatamente después de usarlas y no reutilizarlas.

Aseguran que lo mejor es meterlas en una bolsa plástica antes de tirarlas en un bote de basura cerrado para evitar que los animales las abran o que el viento se las lleve a otro lugar y que terminen reposando en el océano, informa MegaNoticias.

“Puede parecer obvio, pero hay que decirlo: mucha gente deja las mascarillas en la calle, las tira en el piso, en lugar de meterlas en la basura. Luego, el viento se las lleva y frecuentemente terminan en un río y este las transporta al mar”, dice al medio británico.