Al menos nueve personas murieron y tres resultaron heridas este martes durante dos tiroteos en Californi y Iowa, Estados Unidos. Y una vez más, se reaviva el reclamo contra la tenencia de armas. En California, el principal sospechoso es el trabajador de una granja que abrió fuego contra sus compañeros y luego siguió con el raid violento en otra. En Iowa, el ataque fue perpetrado en un centro asistencial que funciona en una escuela y las víctimas fatales son dos alumnos. 

Según informó Télam, en la granja denominada Mountain Mushroom, productora de hongos, cuatro personas murieron y una resultó gravemente herida, y trasladada a un centro médico para recibir atención. Tres de los fallecidos habrían sucumbido a las heridas camino al hospital.

Durante el segundo tiroteo, en la granja Rice Tucking-Soil, dedicada a la venta de piedras decorativas, tres personas murieron, según precisaron fuentes policiales.

El sospechoso de haber consumado ambas matanzas, un hombre de 67 años, fue detenido por la Policía del condado de San Mateo, donde tuvieron lugar los tiroteos. Fue identificado como Zhao Chunli, trabajaba en la granja de hongos, actuó solo, y atacó a sus compañeros de trabajo.

Después de atacar la primera granja, el hombre fue a la segunda a perpetrar otro ataque, según relataron las fuentes policiales.

Mas temprano, otras dos personas murieron y una resultó gravemente herida tras un tiroteo en un centro de ayuda a jóvenes en la ciudad de Des Moines, capital del estado de Iowa, informaron las autoridades policiales.

La policía local y el personal de bomberos respondieron al informe de un tiroteo en Starts Right Here, una escuela subvencionada o escuela charter, que dirige un programa para los jóvenes en situación de riesgo, y encontró a tres personas heridas, dos de ellas de gravedad, reportó la agencia AFP.

"Esas dos personas, ambos estudiantes, están muertos ahora en el hospital. La tercera persona, que es un empleado de la escuela, se encuentra en estado grave", indicó el sargento Paul Parizek, portavoz del departamento de policía de Des Moines, durante rueda de prensa.

"El incidente estaba claramente dirigido, no fue al azar, no hay nada aleatorio en esto, el motivo es algo que vamos a tratar de resolver", añadió Parizek.

Siguiendo luego las pistas de los testigos, la policía detuvo más tarde un vehículo y retuvo a tres posibles sospechosos del tiroteo, pero sin mencionar si tenían cargos formales, mientras prosigue la investigación.

Los tres tiroteos de este martes se producen tras la masacre ocurrida el sábado pasado por la noche en el sur de California, en la que once personas fueron tiroteadas mortalmente, en una sala de baile, por un inmigrante asiático de 72 años, que más tarde se suicidó.