Profesionales de la salud de Rosario se manifestarán este jueves para reclamar un aumento de los honorarios que cobran por la prestación del servicio y la reducción de los plazos de pagos diferidos que afectan al sector.
La concentración tendrá lugar a las 13 del jueves en Tucumán y España, frente a la sede de la Asociación Médica de Rosario (AMR). Al respecto, el secretario general de la entidad, Dardo Dorato, expresó que se trata de "una expresión más de las muchas" que médicos y médicas han llevado a cabo durante los últimos meses a modo de reclamo.
"Lo que nos llena de angustia es que el tema salud no está en las principales agendas. Ni siquiera figuró en los debates presidenciales", manifestó Dorato en diálogo con Punto Medio (Radio 2) este martes.
Al respecto, consideró que en la discusión pública "parece que la salud fuera un tema resuelto o irrelevante", que queda relegado como consecuencia de la crítica situación económica que atraviesa el país.
Dorato indicó que esto es comprensible, puesto que "la salud se financia principalmente a partir del aporte de los sueldos", lo cual se vuelve cada vez más complejo e insuficiente en un contexto de "pérdida de poder adquisitivo". En este marco fue que médicos y médicas comenzaron a cobrar copagos para los que "en la mayoría de los casos los pacientes tienen tolerancia", aunque esto también empeora con el tiempo porque "poner al paciente en el medio es lo peor que puede pasar", añadió.
Pagos diferidos en hasta 120 días
"Hay una crisis terrible porque el grueso de la asistencia en seguridad social deriva de las obras sociales, no de las prepagas, que representan alrededor del 15% del mercado", precisó en el mismo sentido. A su vez, remarcó que los médicos y médicas "están muy alterados y movilizados" fundamentalmente por dos cuestiones. Por un lado, "el promedio de pago de una consulta no alcanza ni el 50% de lo que fija un colegio de médicos en la provincia de Santa Fe". Por otro, "hay pagos diferidos que van desde 60 o 90 días hasta 120 días en algunos casos". El secretario general de AMR también advirtió que "muchos centros de salud y clínicas, pequeños consultorios, están cerrando porque no pueden mantener su estructura". "La ecuación está rota", sostuvo en esa línea. Por otro lado, apuntó contra las obras sociales por el aumento de los precios de los medicamentos, a los que "nadie les pone un techo". "Lo que dicen es que, históricamente, el presupuesto anual para medicamentos era de un 16% y que ahora está arriba del 32%", señaló y agregó: "La industria farmacéutica hace lo que quiere". También comentó que en las discusiones por el pago de honorarios las mayores dificultades surgen con las obras sociales más grandes. "Las más pequeñas, que hacen el mayor esfuerzo, son las que primero se prestan a atender nuestros reclamos", mientras que las empresas de mayor tamaño, sostuvo, "quieren hacer un negocio financiero con la plata que le corresponde a los médicos".
