“No hay ninguna dificultad para una mujer en manejar un colectivo; es la misma que puede tener un hombre”. Con claridad, Natalia, una de las cuatro conductoras que en pocos días comenzará a manejar un colectivo urbano si la empresa municipal de transporte Movi cumple el fallo de la Justicia que la obliga a reincorporarla junto con tres compañeras, explica por qué considera que el hecho de que haya sido separada de esa función fue un acto de discriminación por género.

Tres días de plazo tiene la empresa Movi, una vez notificada, para cumplir el fallo de la jueza Paula Calace Vigo, titular del Juzgado Laboral N°10 de los Tribunales de Rosario, que entendió comprobada la discriminación por género denunciada por las trabajadoras, no solo por el incumplimiento a la normativa estatal de 2006 tendiente a garantizar la “igualdad real de oportunidades” (Semtur –absorbida por Movi– jamás había incorporada a una mujer), sino debido a que la empresa tampoco ofreció prueba alguna que desacreditase la idoneidad de las cuatro mujeres que ya se habían desempeñado como choferes de la empresa.

En diálogo con el programa Radiópolis, de Radio 2, Natalia celebró el fallo, dijo que será “un hecho histórico” que ella y sus compañeras puedan conducir un colectivo del transporte urbano de pasajeros y sostuvo que en el resto del país “las mujeres están complicadas” para lograr algo similar.

“Hubo discriminación de género”, dijo sobre la actitud de la empresa. Y sostuvo que pese a que hay una ordenanza que obliga a contratar mujeres siempre que las llamaron fue para reemplazos. Ella misma hizo uno por tres meses, pero se encontró que cuando había que cubrir puestos permanentes solo llamaban hombres.

Para ella, “no hay ninguna dificultad” para manejar un colectivo por el hecho de ser mujeres, “es la misma que puede tener un hombre”.

“Manejar un colectivo es lo mismo que manejar una auto, no requiere de una fuerza extra. Hoy trabajo en un taxi. La mayor dificultad es el prejuicio que sostiene que una mujer puede tener una limitación de ese tipo”, agregó.

“Con esta lucha abrimos la posibilidad de que todas las mujeres que quieren trabajar de colectiveras sean contratadas”, enfatizó.