El Concejo municipal aprobó la actualización del nombre de la Oficina Municipal del Consumidor, que pasará a denominarse Oficina Municipal de los Derechos Ciudadanos, Consumidores y Usuarios, con el objetivo de adecuar su identidad institucional a las funciones que el organismo desarrolla desde hace más de tres décadas.
Fuentes oficiales informaron que la medida forma parte del proceso de modernización institucional que atraviesa la nueva ciudad autónoma de Rosario, en línea con la ampliación de competencias locales y con la necesidad de fortalecer los mecanismos de protección ciudadana.
En ese contexto, la actualización del nombre busca reflejar de manera fiel el alcance real del trabajo cotidiano de la Oficina y alinearla con los estándares contemporáneos de protección ciudadana. La nueva Oficina comenzará a funcionar desde el 10 de diciembre y estará bajo la jefatura de Nadia Amalevi, mientras que la secretaría estará a cargo de Silvana Teisa.
Rosario fue pionera en el país al crear, mediante la ordenanza 5.442/1992, una oficina especializada en la defensa de las y los consumidores. Con el tiempo, ese espacio se convirtió en un referente local al que la ciudadanía recurre no sólo por conflictos de consumo, sino también por problemáticas vinculadas a servicios públicos, vivienda, endeudamiento familiar, accesibilidad, derechos digitales, protección de datos personales y reclamos ante la administración pública.
La reciente reforma de la Constitución de la Provincia de Santa Fe, en su Artículo 32, amplía y jerarquiza los derechos de consumidores y usuarios, incorporando la protección frente a riesgos en entornos físicos y digitales, la tutela del patrimonio, la información adecuada, la prevención del sobreendeudamiento y la obligación del Estado de garantizar sistemas administrativos de defensa y educación para el consumo.
Asimismo, se garantiza la continuidad de la atención personalizada que caracteriza a la Oficina, un rasgo distintivo construido por sus trabajadoras y trabajadores durante más de treinta años. Su tarea seguirá centrada en recibir, orientar y acompañar a cada vecino y vecina, manteniendo un servicio cercano, accesible y de alta calidad.
“El cambio no altera la esencia del organismo: la fortalece. Le da un marco institucional acorde a las demandas actuales y reconoce a Rosario como una ciudad que históricamente estuvo un paso adelante en la defensa de los derechos”, destacó María Eugenia Schmuck, autora de la iniciativa.
Amalevi por su parte, resaltó el trabajo de Solange Bobbet al frente de la Oficina del Consumidor, quien cerró el año con récord de consultas atendidas y gestiones resueltas. “Su conducción fortaleció los mecanismos de acompañamiento, mediación y respuesta a los reclamos ciudadanos, consolidando un acompañamiento más ágil, cercano y eficaz para la defensa de los derechos de las y los consumidores”.
