Rosario, la región y buena parte de la provincia de Santa Fe continúan bajo un alerta amarillo por altas temperaturas, en las puertas a un fin de semana que también será sofocante. A las 7 de la mañana el termómetro en la ciudad ya superaba los 20 grados y el Servicio Meteorológico Nacional (SMN) prevé máximas de hasta 39. 

La humedad era del 87 por ciento, la presión de 1007.8 hPa y el viento soplaba desde el sur a 5 kilómetros por hora, mientras que la visibilidad era de 10 kilómetros. 

El pronóstico extendido para los próximos días.

El calor agobiante seguirá en la ciudad al menos hasta el domingo o el lunes. Recién para esos días el SMN pronostica tormenta y chaparrones aislados, a partir de la noche del domingo y durante toda la jornada en el primer día de la semana laboral, que harían bajar un poco la temperatura. Mientras tanto, este sábado se anuncia una mínima de 28 y una máxima de 38. 

La situación era similar e incluso más preocupante en cuanto a la intensidad del calor en sectores de Mendoza, norte de Neuquén, Buenos Aires, San Luis y La Pampa, en alerta naranja.