Este jueves al mediodía, propietarios y docentes de jardines maternales y particulares de Rosario llevaron a cabo una ruidosa protesta en la plaza 25 de Mayo, frente al edificio de la Municipalidad. Piden que la intendencia les “baje un protocolo para volver a trabajar” y advierten que “el 90 por ciento de los papás y las mamás volvieron a trabajar y los chicos tienen que estar en el jardín”.

En la conferencia de prensa de ayer, el intendente Pablo Javkin anunció que los jardines maternales podrían volver a abrir sus puertas, pero solo para que los docentes ingresen para dar clases virtuales. A este anuncio, las maestras respondieron que en muchos casos debieron cortar el servicio de internet porque no podían pagarlo. 

En vivo en De 12 a 14 (El Tres), una de las voceras del reclamo describió que “somos jardines autoconvocados que venimos a expresar las voces de las niñas y los niños y también de sus papás, ya que el 90 por ciento ya empezó a trabajar”.

La maestra comentó que “nosotros queremos que los niños estén donde tienen que estar, que es el jardín”. Y añadió que “estamos esperando que la Municipalidad nos baje un protocolo para empezar a trabajar”.

“No venimos solamente por la parte económica; nos dicen los papás que han aparecido algunos trastornos en los chicos, que están asustados, que no quieren salir. Nosotros tenemos que enseñarles que tienen que convivir con el virus”, destacaron.

Otra docente expresó: “Valoramos que hemos tenido mesas de diálogo, el propio intendente nos ha dado su teléfono celular para hablar estos temas, pero la verdad es que por ahora no aparece ninguna respuesta”.

“Somos muchos jardines de barrio, que no pueden seguir pagando alquileres ni mantener las instalaciones”, reflejaron. “Estamos trabajando en el tema de los protocolos y necesitamos que la Municipalidad nos dé el okey”, agregaron luego.

“Sabemos que desde que se flexibilizó al cuarentena, tenemos a niños que juegan en las casas con sus amiguitos o con vecinitos en los palieres de los edificios, que no se está respetando el distanciamiento, entonces esos chicos deben estar en los jardines”, apuntó una de las maestras.

Y confiaron que “muchas de las docentes están haciendo trabajos de niñera en las casas de los alumnos” y que “muchos papás han dejado de pagar las cuotas de los jardines para pagarles sueldos a las niñeras”.

“En Rosario hay unos 200 jardines particulares, de los cuales 5 han cerrado desde el comienzo de la cuarentena”, confirmaron.

“Nos dicen que nos entregan un subsidio, pero en realidad el IFE es una ayuda por única vez. Si no podemos volver a trabajar en lo inmediato, necesitamos un subsidio mensual porque así no podemos seguir”, concluyeron.