Google homenajeó este lunes con uno de sus clásicos "doodles" a Anne McLaren, una científica que contribuyó a cambiar la vida de miles de padres en el mundo y este 26 de abril hubiera cumplido 94 años. 

Esta investigadora británica fue pionera en el estudio de cómo se desarrollan los embriones, y sus experimentos en ratones en 1958 fueron la base de la fertilización in vitro, el proceso en el que el óvulo se retira de los ovarios de la mujer, se fertiliza con esperma en un laboratorio y vuelve a implantarse en el útero.

Veinte años después de su descubrimiento, en 1978, nació Louise Brown, "la primera bebé de probeta del mundo". Desde entonces, incontables parejas han cumplido su sueño de ser padres gracias a los estudios de McLaren.

La pequeña Louise Brown se convirtió en "la primera bebé de probeta del mundo".

La científica, considerada como una de las biólogas reproductivas más significativas del siglo XX, murió en 2007 en un accidente de tráfico mientras viajaba en automóvil desde Cambridge a Londres en Reino Unido.

Una técnica revolucionaria


Anne McLaren nació el 26 de abril de 1927 en Londres, y durante su vida reconoció que su pasión por la ciencia había comenzado desde niña.

Estudió zoología en la prestigiosa Universidad de Oxford, donde aprendió de biólogos talentosos como Peter Medawar, ganador del Nobel en 1960 por sus trabajos en inmunología humana.

Los descubrimientos de McLaren sentaron las bases para el desarrollo de la fertilización in vitro.

En los años 50 McLaren comenzó a experimentar con ratones para entender mejor el desarrollo embrionario de los mamíferos, y ocho años después, ella y su colega John Biggers publicaron los resultados del estudio en la revista Nature.

El dúo de científicos había logrado cultivar exitosamente los embriones de ratones en un laboratorio, los cuales fueron transferidos al útero del ratón hembra y se desarrollaron sanamente.

Este experimento demostró la posibilidad de fecundar fuera del cuerpo de la madre, tratándose de un logro científico sin precedentes que cimentó el desarrollo de la fertilización in vitro.

La fertilización in vitro le permite a millones de parejas cumplir el sueño de ser padres.

Entre 1992 y 1996, McLaren ostentó el cargo de vicepresidenta de The Royal Society, la institución científica más antigua del mundo, siendo entonces la primera mujer en ocupar el cargo en más de 300 años de historia.

Además, en 1994 la Asociación Británica para el Avance de la Ciencia la eligió como su presidente, y desde allí se dedicó a promover el interés por la ciencia para el público general.