Este martes, en el marco de la causa denominada Brigadas, en la que se juzga delitos de lesa humanidad cometidos en el Pozo de Banfield, Pozo de Quilmes, El Infierno (Brigada de Lanús) por privación ilegal de la libertad; tormentos; homicidios; desaparición forzada; sustracción, retención y ocultamiento de niños y niñas nacidos en cautiverio; y delitos sexuales; la justicia condenó a prisión perpetua a Guillermo Domínguez Matheu, Carlos Fontana, Federico Minicucchi, Carlos Romero Pavón, Roberto Balmaceda y Jorge Di Pasquale. A su vez, Alberto Julio Candioti fue condenado a 25 años.

Candioti recibió una pena como ex jefe de la Sección Comando y Servicio. Había sido detenido en Montevideo el 23 de mayo de 2013, luego de que (más de un año antes) el 6 de marzo de 2012 el Juzgado Federal N° 3 de La Plata, a cargo del juez Arnaldo Corazza, emitiera una orden de captura internacional en su contra por su participación en crímenes de lesa humanidad cometidos durante la última dictadura.

Había nacido el 16 de enero de 1945, en Santa Fe. Comenzó su carrera militar en el Liceo. Al mismo tiempo dio sus primeros pasos como dirigente deportivo. Se asoció al Club Atlético Colón el 14 de agosto de 1976. Un año después comenzó a recorrer los pasillos de la Asociación del Fútbol Argentino (AFA), como representante del Sabalero.

En la década del 80, integró varias comisiones directivas y afianzó su relación con Julio Humberto Grondona. En 1985 se retiró como Mayor y en 1989 se recibió de abogado en la Universidad Católica de Santa Fe. Luego, fue parte del Registro Nacional de las Personas (RENAPER) donde llegó a estar a cargo del área jurídica.

En la década del 90’ fue vicepresidente de Colón, asesor jurídico de Grondona, al que llegó a defender ante una denuncia por administración fraudulenta. 

En 2002 fue candidato a presidente del club santafesino, aunque perdió. Luego se desempeñó como asesor adscripto de la presidencia de la AFA y apoderado legal del Instituto Superior de Arbitraje.

Candioti fue militar y agente del Batallón 601. Según la investigación judicial actuó en al menos tres centros clandestinos de detención: en la Brigada de Investigaciones de San Justo, en el Pozo de Banfield y en La Cacha. 

En el Destacamento de Inteligencia 101 figura como Jefe de la Sección Comando y Servicios entre el 9 de enero de 1978 y el 7 de abril de 1979. Bajo su línea de mando estaban los tenientes, subtenientes y suboficiales, y también una parte de los civiles que provenían del 601.

En San Justo se precisa que “en virtud del cargo que ostentaba, Candioti debe responder en orden a los hechos que damnificaron a las víctimas que estuvieron secuestradas en la Brigada de Investigaciones de San Justo durante su período de revista”. En Banfield se lo menciona como “Responsable de las áreas de Personal e Inteligencia en la Plana Mayor (cargos S1 y S2, respectivamente, nada menos), con el grado de capitán”.

Fuente: infojusnoticias