El año cierra con registros de lluvias por encima de la media y lo mismo ocurrirá durante el primer trimestre de 2024. El fenómeno estará acompañado por un leve descenso de la temperatura media que estará acompaño por los días nublados en la región durante el verano.
El “Informe Semestral Situación Meteorológica” del Sistema de Alerta Temprana (SAT) advierte anomalías en los mapas de precipitaciones con un “un exceso en el primer trimestre” que luego se irá disipando, algo que marcan también los pronósticos actualizados de un fenómeno del Niño que perderá fuerza con el correr de los meses.
Noviembre lluvioso
El mes que pasó tuvo lluvias “muy abundantes en el cuadrante noreste de la provincia”, indicó el balance del grupo Centro de Monitoreo Meteorológico y Climático de Granadero Baigorria. Las lluvias ocurrieron como estaba previsto en los mapas previos pero la zona noroeste no tuvo la abundancia esperada en las mismas.
Rosario registró 159 milímetros, por debajo de la capital provincial (275mm), Reconquista (265mm) y Rafaela (267mm) y por encima de Rufino (55mm) y Tostado (137mm).
“En los valores puede apreciarse que se condicen con el coloreado en el mapa de anomalía de precipitaciones. En cuanto a la anomalía de temperaturas, se cumplió lo previsto con valores por debajo de la media”, definió el informe del SAT.
En la ciudad de Santa Fe, por ejemplo, la temperatura media para noviembre fue la más baja de los últimos doce años, con un valor de 22.9° (contra 24.1° de la media para el mismo período). Esa baja condice con el predominio de días nublados.
Más agua para el primer trimestre
El último mes de 2023 repite el escenario y se esperan “precipitaciones que tendrán un exceso generalizado en toda la provincia, comenzando por el norte desde principios de mes y en la segunda quincena extendiéndose al resto del territorio”. Es decir, que desde este fin de semana llegarían al Gran Rosario.
Sobre el origen del fenómeno del Niño, el trabajo observa que “el Océano Pacífico ecuatorial continúa con su temperatura elevada” pero “muestra una tendencia a enfriarse, llegando a valores normales para junio”.
Durante el primer semestre del 2024, las previsiones de lluvias muestran “un exceso en el primer trimestre, y una paulatina disminución de la anomalía hacia mitad del año”. La situación mencionada favorecerá que el repunte del río Paraná continúe dentro de niveles normales a altos, hasta el final del otoño. Todo esto se condice con una fase “Niño” activa en la región según el NOAA.
El fenómeno tendría una intensidad de moderada a fuerte en dicho territorio en el período estival.
Las nubes bajan las temperaturas medias
En cuanto a las temperaturas, se observa que diciembre y enero tendrán las temperaturas medias levemente por debajo de lo normal. Esto será debido al predominio de días nublados que tendrá el mes.
Al margen de eso, Jorge Giometti, titular del Centro de Monitoreo y SAT, adelantó a Rosario3 que habrá jornadas "muy cálidas, con algunas olas de calor muy fuertes, pero interrumpidas por frentes fríos que van a acelerar tormentas fuertes”.
Hacia adelante, se observan algunas variaciones, manteniendo las cifras medias dentro de los normales a levemente por encima de lo normal. Esto también se condice con la previsión de lluvias, y que desde el otoño la anomalía de las mismas comienza a disminuir.
Vale mencionar que el mes de mayo se observa la zona oeste de la provincia que podrían tener valores por debajo de la media. Esto podría contribuir a la ocurrencia de algunas heladas tempranas.
Luego, con el análisis de los datos aportados por el NOAA sobre el posible comportamiento de la temperatura del Océano Pacífico ecuatorial, podrían observarse indicios de un posible final del evento “Niño” en el transcurso del otoño de 2024. Posteriormente, sería posible una transición a una fase neutral para el invierno.
