Varios observadores de estrellas en Alaska, Estados Unidos, quedaron desconcertados después de ver un inquietante remolino azul situado en medio de auroras boreales. Sin embargo, a pesar de su aspecto misterioso y alienígena, el fenómento tenía una explicación muy normal.

Según publicó el dierio británico The Sun, el remolino azulado era combustible residual que se había liberado del cohete SpaceX de Elon Musk, que se lanzó desde California tres horas de ser vistas a mediados de abril. Las fotos volvieron a viralizarse y con ellas se reavivó el debate.

"A veces, los cohetes tienen combustible que debe ser expulsado", expresó a Associated Press el físico espacial Don Hampton, profesor asociado de investigación en el Instituto Geofísico Fairbanks de la Universidad de Alaska. 

"Cuando hacen eso a gran altura, ese combustible se convierte en hielo y si está a la luz del sol cuando estás en la oscuridad en el suelo, puedes verlo como una especie de gran nube y, a veces, se arremolina", agregó.

Aún así, no es algo común, dijo Hampton, y señaló que solo vio un evento así unas tres veces. Debido a esto, las imágenes y videos de la espiral rápidamente se viralizaron en Internet.