La justicia declaró herederos universales de los bienes del escritor Jorge Luis Borges y de María Kodama a los cinco sobrinos de esta, y de esta forma se convirtieron en los legítimos sucesores del legado del autor de El Aleph. Toda la obra literaria permanecía en guarda de la docente, traductora y escritora hasta que murió a los 86 años el 26 de marzo último.

La decisión la tomó el Juzgado Nacional de Primera Instancia en lo Civil Nº 11, el mismo que en 1986 se encargó de la sucesión de los bienes de Borges en favor de Kodama. Los herederos son Mariana del Socorro, Martín Nicolás, María Victoria, Matías y María Belén Socorro.

En la resolución 21583/2023, el juzgado resolvió "declarar, en cuanto hubiere lugar por derecho, que, por el fallecimiento de María suceden, en su carácter de universales herederos a sus sobrinos".

Fernando Soto, quien durante años fue representante legal de Kodama e integra la Fundación Internacional Jorge Luis Borges, agregó que "éstas han sido las únicas personas presentadas en autos invocando derechos hereditarios".

En abril se presentaron para ser reconocidos herederos del patrimonio Kodama –dentro del que se encuentra el legado de Borges–, y en ese momento solicitaron inventariar y secuestrar "con carácter urgente los bienes muebles", "determinar el contenido del acervo sucesorio" y "salvaguardar la herencia de gran valor literario e histórico", compuesta entre otras cosas por importantes obras literarias, premios y condecoraciones, manuscritos, fotografías, material periodístico y títulos de propiedad.

Los sobrinos de Kodama pidieron "facultar" a la justicia a "allanar domicilio, hacer uso de la fuerza pública y contratar los servicios de un cerrajero para violentar las puertas de ingreso y/o cajas de seguridad que pudiera haber en los inmuebles", en caso de ser necesario; y que se "designe depositaria de los bienes" a María Victoria, quien los representa incluida en la demanda.