Diego Maradona sigue en el país recuperándose de una lesión en su hombro. Está en su casa de Nordelta donde fue visitado por Rocío Oliva y ésta, tras una pelea con Lili, terminó a los golpes. La trama según lo que trascendió

El ex DT de la Selección Argentina llegó a Buenos Aires el 21 de mayo, luego de renovar su contrato como técnico de Dorados de Sinaloa, para operarse con el Dr. Jorge Batista. Separado de Verónica Ojeda, el ex futbolista se muestra "distraído, deprimido, angustiado y descuidado". Y hasta ahora, no quiso ir al médico. En este marco accedió a que Rocío Oliva pase por su casa de Nordelta. 

Rocío debía entregarle unas cosas que le pertenecían a él y, según reveló Luis Ventura, Maradona busca acelerar el título de directora técnica de la cronista deportiva en Argentina, para que viaje con él a México y se incorpore a su equipo de trabajo en Dorados de Sinaloa.
Pero a este rumor de reconciliación se le sumó la versión de Lío Pecoraro, quien afirmó que Rocío intercedió para que Diego y Dalma se reencuentren. "Eso ocurrió el sábado y Maradona conoció a su nieta, Roma. ¡Felices los 4!", informó el periodista de espectáculos según lo publicado por DiarioVeloz.

Por otra parte, desde Intrusos dieron a conocer un nuevo escándalo en la vida de El Diez. "Hubo una gran pelea entre una de las hermanas de Diego, Lili, y Rocío Oliva. La discusión fue por un tema de dinero y está todo muy caldeado", contó Adrián Pallares.

Según contó el conductor temporal del ciclo de América, Rocío "maltrató" a Lili y la hermana de Maradona se "defendió a los golpes". "Le pusieron los puntos a Rocío y le contaron cómo está la salud de Diego. Pero a mí me hablan de golpes. Que Lili le pegó porque la maltrató.

"«Esta chica se cree que es la novia de Diego y ya no lo es más», me dijeron", remarcó. 
Al mismo tiempo, detallaron que esta pelea se debió a que las hermanas de Diego sostienen que Rocío volvió a la vida de DT en busca de dinero. Cabe remarcar que Rocío Oliva le reclamó vía judicial a Maradona una suma cercana a los 6 millones de dólares por los cinco años de convivencia y por toda la fortuna que él cosechó durante esos años en compañía suya.