“Tartita” y “Campera”. Esos son los apodos que surgieron en la investigación del crimen de una mujer cometido en febrero de 2022 en una cuadra de barrio Tablada que en menos de dos años tuvo tres asesinatos de mujeres. Los acusados tienen 20 y 25 años y este viernes fueron imputados y puestos en prisión preventiva hasta el juicio por el delito de homicidio agravado y portación de armas.

En una audiencia que los acusados siguieron por Zoom, el fiscal Patricio Saldutti imputó a Juan Elías “Campera” S., de 25 años y a Brandon Michel “Tartita” B., de 20, por haber matado un disparo en la cabeza a Viviana Alejandra Guevara, de 28, la tarde del domingo 13 de febrero, mientras la mujer estaba en la boca del pasillo de Ayacucho 4028

Los testigos vieron que los homicidas iban en bicicleta y dispararon sobre la mujer, que se encontraba sentada junto a otras personas. Uno de los impactos le dio en la cabeza, y aunque fue trasladada al Hospital Roque Sáenz Peña por su pareja, falleció.

El crimen se enmarcaría, según la investigación, en un contexto de disputas por la venta de drogas al menudeo. Testimonios reservados señalaron que la víctima vendía estupefacientes para la organización de un hombre que está preso en la cárcel de Piñero.

Campera, cuyo domicilio en Uriburu al 200 fue allanado el 22 de junio, cayó este miércoles en una casa de Córdoba al 100 de Roldán, de donde la Policía secuestró una pistola, un trozo de cocaína, sustancias para estirar la droga y una balanza.

Según confiaron fuentes de la causa, al ser allanado Campera intentó destruir su celular arrojándolo contra el piso.

Tartita ya estaba detenido y con prisión preventiva por una causa de portación de arma desde el 21 de junio, señala la investigación.

Ambos, a su vez, no serían más que soldaditos de otros presos señalados como instigadores en otras causas de violencia territorial de barrio Tablada, sostuvieron los investigadores.

Al término de la audiencia, el juez Hernán Postma dictó la prisión preventiva por el plazo de ley para la dupla por los delitos de homicidio y portación de arma.

La cuadra de Ayacucho al 4000 se perfiló en la última década como una de las más violentas de la ciudad. El día antes del crimen, una mujer había sido baleada en una pierna a metrosd el cruce con Centeno.

En esos cien metros, en los últimos dos años dos mujeres fueron muertas a tiros en contexto de disputas entre bandas o de represalias.

Una de ellas, Nélida Susana Benítez (45), el 8 de junio de 2021, que hasta antes de ser asesinada poseía una custodia policial porque estaba amenazada. Y un año antes, en el mismo pasillo ejecutaron a Mariana Valeria Espinoza, quien era la madre de Lucas Ariel “Berraco” Espinoza, un joven vinculado con la banda de los Monos que desde mayo purga una condena a dos décadas por un homicidio.