Un hombre de 73 años –identificado por las iniciales J.A.B.– fue imputado por los delitos de abuso sexual con acceso carnal agravado a sus cuatro hijastras. Las víctimas lo denunciaron la semana pasada y el acusado enfrentó la audiencia judicial este domingo. Al padecer una enfermedad terminal, el sujeto estará detenido en su domicilio con tobillera electrónica.

Según información difundida en el programa Telenoche Rosario (El Tres), el hombre fue imputado por abuso sexual cometido contra un menor de 18 años aprovechando la situación de convivencia preexistente con la misma en múltiples hechos y cuatro víctimas.

Según describió la Fiscalía en la audiencia desarrollada bajo la modalidad de videoconferencia, los hechos se dieron "en múltiples ocasiones y en forma regular y habitual".

El Ministerio Público de la Acusación (MPA), detalló que el fiscal de la Unidad de Delitos Contra la Integridad Sexual, Federico Rébola, imputó reiterados hechos de abuso sexual de cuatro menores de edad que se extendieron hasta su adolescencia y en algunos casos hasta la actualidad. Hoy las víctimas superan los 20 años.

Fuentes de la causa detallaron además que una de las mujeres tiene actualmente una hija de 9 años que adjudica a los abusos y por eso realizarán exámenes de ADN. En tanto, otra de las denunciantes padece una discapacidad motriz.

Además, una de las hijastras relató en su denuncia que el abusador la obligaba a ir a un motel.

Luego de la denuncia presentada en su contra, el sujeto acusado se fugó pero fue detenido por la Policía al día siguiente cuando fue a reunirse con su abogado a la zona de Tribunales.

Por eso, en la audiencia también se le atribuyó no haber respetado el aislamiento preventivo social y obligatorio dispuesto por el Poder Ejecutivo.

La Fiscalía solicitó la prisión preventiva efectiva por el plazo de ley. El juez Florentino Malaponte dictó prisión preventiva con modalidad domiciliaria por tratarse de una persona mayor de edad, con una enfermedad severa y por presentar otros problemas de salud.

La prisión domiciliaria deberá cumplirse con tobillera electrónica por el plazo de ley, fijando domicilio con el requisito que no habiten menores de edad en el lugar.

Por ésta última condición, que no pudo cumplir aún, permanece en una dependencia penitenciaria.