Concepción, una mujer de 95 años que vive en Constitución al 1800, recibió este viernes el llamado de sujetos que se hacían pasar por sus sobrinos y le pedían que entregue dinero porque –según dijeron– estaba por instalarse un nuevo “corralito” bancario en la Argentina.
La mujer desconfió y nunca quiso abrir la puerta de su casa, a pesar de que dos personas se hicieron presentes en la vivienda queriendo concretar la estafa y el robo.
Un taxista que frenó frente al domicilio alertó a Concepción que todos los bancos ya estaban cerrados cuando ella le dijo que quería ir hasta una entidad bancaria. Allí la mujer se dio cuenta que le querían sacar el dinero.
“Me salvó el taxista”, dijo Concepción al programa Telenoche Rosario (El Tres).
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