Un preso de la cárcel de Piñero, una mujer y un taxista fueron imputados este miércoles como partícipes de una extorsión a una mujer cuya casa de la zona norte fue atacada a tiros el 3 de febrero pasado en Agustín Álvarez al 300. El juez dispuso un régimen especial de comunicación y visitas para el recluso, la sospechosa –que quedó filmada agarrando el pago durante una entrega controlada– quedó detenida y el tachero fue liberado tras una serie de medidas que dieron como resultado de que no tenía conocimiento de lo que ocurría con respecto al objetivo del viaje que realizó la pasajera aprehendida. 

El interno Rodrigo Leonardo Contreras, de 21 años, alojado en el pabellón 8 de Piñero, fue imputado por el fiscal de Balaceras Pablo Socca como el instigador de la extorsión y la balacera, y el encargado de llevar adelante las comunicaciones extorsivas con las dos víctimas, un hombre y la dueña de la casa baleada. Una vez culminada la audiencia, el juez Florentino Malaponte dispuso que sean controladas sus comunicaciones.

El régimen que estableció Malaponte, y que durará por 90 días, indica que las llamadas de Contreras deberán ser a través de una línea telefónica del Servicio Penitenciario a número identificables. A su vez, ordenó que se "extreme el control de las visitas" recibidas por el recluso. Esa última medida incluye que únicamente pueda dialogar con las personas que fueron a verlo y que no pueda mantener conversación con terceros

Por su parte, Cynthia Natalia R., de 46 años, fue imputada como partícipe primaria de la extorsión y quedó en prisión preventiva efectiva por 90 días. El fiscal Socca la ubicó como la persona que se bajó de un taxi en la plaza de Álvarez Thomas y Freyre y directamente se dirigió al tacho de basura en el que había sido depositado un paquete con 250 mil pesos por el pago de la víctima. 

El hecho fue organizado bajo una "entrega controlada", en la que agentes encubiertos coordinaron desde el teléfono del la víctima el pago. Todo quedó filmado, incluso hasta con tomas aéreas con un drone

La negociación que hizo la Policía con el teléfono de la víctima con el preso.

Por la detención de la mujer, las fuerzas de seguridad tuvieron que allanar la habitación 17 de un hotel ubicado en 3 de Febrero al 1200 donde ella se alojaba con su hijo por disposición del Ministerio de Desarrollo Social provincial, ya que se encuentra desempleada y sin techo. 

Por último, el taxista Diego V., de 64 años, fue acusado como partícipe primario de la extorsión, pero quedó en libertad. Explicó una serie de situaciones para desmentir que conocía el objetivo del viaje en el que se procedió al cobro de la extorsión y esa información fue valorada en base a medidas investigativas que se llevaron a cabo