Suele pasar: cada vez que se llega a la sección de tintes de pelo de la tienda o supermercado de referencia, la visión del desastre acecha y se acaba decidiendo dejar el asunto en manos de profesionales.

Pero si por falta de tiempo o de dinero no se puede ir al salón de belleza, hacerlo en casa es la mejor solución, sobre todo si se trata de retoque de raíces o cambios leves que no impliquen decoloración.

 

Es posible hacerlo una misma, en la comodidad del hogar, siguiendo unas pautas básicas:

 

Antes de teñirse

 

Lavar el pelo como de costumbre y dejarlo que se ensucie por dos días. Aunque no es lo más cómodo, especialmente para las que tienen el cuero cabelludo graso, esto ayuda a que los aceites naturales del pelo penetren mejor en la fibra capilar.

Aplicar vaselina en el contorno de la cara para que la piel que rodea al crecimiento del pelo no se manche. Poner especial atención detrás de las orejas y en la frente.

 

¿Un secreto para no equivocarse en la elección del color? Sin duda alguna, lo mejor es optar siempre por un tono más oscuro. Un último tip: los tonos naturales dorados o cenizas son los únicos colores que cubren canas con seguridad.

 

Manos a la obra

 

Preparar la mezcla. ¿Sabías que el color de oxidación contiene precursores que necesitan una reacción química con el oxígeno para crear las moléculas del color y que, una vez unidos, están listos para penetrar en la estructura capilar? Por eso es importante aplicar la mezcla de inmediato: una vez fuera del envase y en contacto con el oxígeno, el peróxido de hidrógeno comienza a trabajar y tiene un tiempo limitado, sólo hace efecto dentro de los 40 minutos de preparada la mezcla.

Dividir la cabeza en cuatro secciones, como si fuera una cruz, y sujetar cada una con un gancho. Entonces, pinceleta en mano, iniciar la aplicación desde la frente o desde la región donde exista una mayor concentración de canas. Aplicar en las raíces, dejar actuar según indique el folleto de instrucciones (suelen ser unos 20 minutos), distribuir, masajear y dejar en reposo de nuevo (en promedio son 10 minutos más). Esta es la forma de proceder si lo que se necesita es un retoque de raíces. Transcurrido el tiempo recomendado en la caja del producto, aplicar el resto de la mezcla en los largos y puntas del cabello y dejarla actuar durante 10 minutos más. De esta forma se va a conseguir refrescar el color de todo el cabello pero sin oscurecerlo por la acumulación de pigmentos.

 

Cambio de tono

 

Si se quiere hacer un cambio de tono, comenzar también desde las raíces y extender el producto hacia los largos (si se tiene mucho pelo, es probable que se necesiten dos envases) y trabajar el cabello mechón por mechón masajeando con los dedos para que el producto penetre. Masajear y dejar actuar (unos 30 minutos). Respetar el tiempo que indica el producto que se eligió. No dejarlo más de la cuenta, ya que una vez el cabello haya tomado el color, no se va a conseguir otro tono por estar más tiempo con él puesto.

Cumplido el tiempo de exposición, aplicar un chorro de agua y frotar todo el cabello. Enjuagar abundantemente con agua fría para mantener más tiempo el color y lavar con shampú hasta que el agua salga limpia. Se puede repetir el procedimiento y luego aplicar un acondicionador nutritivo o una ampolla o máscara que selle las cutículas.

 

Luego de la tintura

 

¿Te manchaste la ropa con la tintura? En ese caso se debe mojar la mancha con jugo de limón, dejar 5 minutos en reposo y agregar un poquito leche fría. Después de una hora, lavar normalmente.

Un último truco, esta vez, bien casero: para evitar que el cabello se reseque y mantenga su buena apariencia, mezclar 1 huevo con 30 ml. de cerveza. Peinar el pelo con la mezcla y cubrirlo con un gorro de plástico. Dejar que actúe 15 minutos y enjuagar con abundante agua tibia.

 

¡Seguí estos tips y con la práctica llegarás a ser una experta!