Newell’s continúa a paso firme en la Copa de la Liga y se ilusiona. Con un gol de Juan Manuel García de penal, este miércoles le ganó 1-0 a Banfield en el Coloso Marcelo Bielsa por la fecha 11 y se afianza en los puestos de clasificación a cuartos de final del torneo.

Al equipo de Javier Sanguinetti le costó meterse en el partido. En un primer tiempo parejo, la Lepra sólo llevó algo de peligro mediante acercamientos con pelotas paradas y casi no tuvo situaciones claras para convertir, a excepción de un potente remate de Willer Ditta dentro del área que tapó Bologna. Antes, el arquero Arboleda le había tapado una chance a Cruz

Tras ese comienzo irregular, Newell’s fue mejorando progresivamente hacia el final del primer tiempo y empezó a fabricar más espacios, pese a que seguía sin tener peso ofensivo. En ese contexto se encontró con la jugada que cambió el partido: Reasco se escapaba por derecha, Tanco lo bajó y se fue expulsado por doble amarilla. Desde allí nació otro partido. 

La superioridad numérica le dio tranquilidad al equipo, aunque no pudo abrir el marcador en la primera parte, y alteró los planes del Taladro, que físicamente empezó a sentir el desgaste de estar con uno menos y cedió campo y balón. 

Para el complemento, Sanguinetti hizo varios cambios y fue a la carga con Vangioni y González, que le dieron más profundidad al ataque. Salió decidido a ganarlo y volcado con determinación hacia el arco rival, con Pablo Pérez oficiando de conductor

García ya pateó desde los doce pasos y sería el único gol de la tarde. (Alan Monzón/Rosario3)

A la Lepra no le resultó fácil, pero de a poco fue llevando a Banfield contra su propia área y lo puso contra las cuerdas. Garro, que entró de muy buena forma en el primer tiempo por la lesión de Sordo, y Panchito abrieron la cancha y generaron espacios ante un rival metido atrás. 

Justamente, fue Garro quien ideó la jugada del penal. Paró la pelota en la mitad del campo, avanzó, levantó la cabeza y asistió milimétricamente a García, que se bancó la marca y después cayó en el área por la falta de Gissi. El nueve lo transformó en el gol del triunfo. 

La ventaja terminó acomodando a Newell’s, que después empezó a justificar desde el juego y las llegadas lo que, en definitiva, fue una justa victoria en casa. 

El rojinegro fue paciente, no se descontroló cuando no encontraba los caminos hacia el arco de Banfield, y construyó a fuerza de voluntad e insistencia un triunfo clave en las fechas finales de la fase de grupos. 

En esta jornada se aseguró seguir entre los tres primeros de la Zona 1, ya que ninguno de sus perseguidores cercanos lo puede superar ni alcanzar. Empujado por las victorias y un Coloso que se convirtió en fortaleza (ganó cinco de los seis que jugó en Rosario), sueña en grande. 

Resumen del partido