Mientras Rosario Central se prepara para jugar el partido de vuelta de los cuartos de final de la Copa Sudamericana ante Bragantino, su vicepresidente Ricardo Carloni recibió la notificación de que Conmebol le abrió un expediente por un polémico tuit, que luego fue borrado. 

"La Unidad Disciplinaria ha tomado conocimiento que el Sr. Ricardo Darío Carloni, Vicepresidente del Club Rosario Central ha realizado declaraciones a través de su cuenta personal de Twitter expresando lo siguiente: 'Penales o no, para Brasil se cobran, para los demás, sea la nacionalidad que sea, siga siga. ¿Muy evidente?", expresa el texto.

En consecuencia, la Conmebol inició un procedimiento disciplinario contra el directivo de Central "con base en la presunta infracción al artículo 12", que señala que todos los miembros “deberán actuar con respeto y estricta observancia a los principios de lealtad, integridad y deportividad”.

El artículo asegura que tanto directivos como protagonistas "no deben comportarse de manera ofensiva, insultante o realizar manifestaciones difamatorias de cualquier índole".

En ese marco, el directivo y el club se exponen a posibles “advertencias, apercibimiento, multa, devolución de premios o retirada de título”, según lo manifiesta el texto y de acuerdo al grado de infracción que la entidad considere.