El capitán del seleccionado argentino, Lionel Messi, dejó este sábado el plantel que permanece concentrado en Madrid. Regresó a Barcelona después de concretar este viernes su vuelta al combinado nacional en la derrota ante Venezuela (1-3) en el estadio Wanda Metropolitano.

El astro abandonó el Hotel Eurostars Madrid Tower minutos antes del mediodía para dirigirse al aeropuerto de Barajas, donde lo esperaba un avión privado para llevarlo a su ciudad de residencia.

Messi volvió a vestir la camiseta "albiceleste" 265 días después de su último partido, que había sido la eliminación ante Francia (4-3) en los octavos de final del Mundial de Rusia.

Si bien estaba previsto que jugara sólo el primer partido de la gira, la salida del rosarino también fue justificada por una molestia en el pubis, que fue informada ayer por la Asociación del Fútbol Argentino (AFA) y ratificada este sábado por su club, Barcelona.

Messi deberá recuperarse de esa dolencia para retomar la competencia del conjunto catalán en la Liga de España, que lidera con diez puntos de ventaja sobre Atlético de Madrid.

Barcelona jugará el sábado próximo ante su clásico Espanyol y ya en abril encarará partidos de Liga ante Villarreal y Atlético de Madrid y frente a Manchester United de Inglaterra (miércoles 10) en la ida de una llave de cuartos de final de la Champions.

El seleccionado argentino, por su parte, volverá a entrenarse esta tarde en el predio de Valdebebas, propiedad del Real Madrid, con vistas al amistoso del martes próximo ante Marruecos en la ciudad de Tanger.