Emiliano Vecchio es uno de los jugadores más experimentados del nuevo Rosario Central de Kily González. Pese a no tener tanto recorrido con la camiseta canalla por su pronta partida tras haber debutado en primera, catorce años después volvió a jugar de manera oficial en el Gigante. Y nada menos que siendo capitán y usando el número 10.
“Es una responsabilidad hermosa que Cristian me dio. Él sabe que estoy preparado para asumirla. Tengo un sentimiento muy grande por esta camiseta, sé lo que representa", dijo el enganche auriazul, de muy buen partido en el debut ante Godoy Cruz. Su último encuentro había sido el 14 de mayo de 2006, en la victoria 2-0 frente a Independiente.
Volver a jugar en Arroyito fue para Vecchio "una emoción muy grande, porque ya lo había pisado varias veces pero no por los puntos. Y el equipo se brindó, se vació y eso es lo que pide la camiseta de Central. Te pueden salir las cosas o no, pero lo más importante es dejar todo”.
"Todo debut es complicado, todos los primeros partidos son difíciles. Y para mí era además la emoción de la vuelta, de ser el 10, de ser el capitán, de usar esa camiseta. Pero estoy en un momento de mi vida en el que estoy disfrutando. Físicamente me siento como pocas veces me he sentido. Mis compañeros, al verlos entrenar, me brindad gran fortaleza. Hay conexión y todos apuntamos ala gloria. Y yo trato de aportar mi granito de arena dentro y fuera de la cancha y de ser un ejemplo", comentó.
Acerca de la fisonomía de este nuevo Central, el ex jugador de Santos explicó: "Se juntaron muchas cosas: la idea de Cristian de ser un equipo intenso, atrevido, que vaya al frente, que no se meta atrás. Y el profe (Ernesto Colman) que es un animal, una persona que te saca el 110%, que está todo el día exigiéndote. Y además somos un equipo humilde, sin figuras. Por eso tenemos que ser intensos, correr; y para eso hay que entrenar. El profe nos tiene a punto con la nutrición, el entrenamiento y el equipo va a marcar diferencias en eso".
Central ha demostrado ante el Tomba serios desajustes defensivos. Para Emiliano, es normal porque "este tipo de juegos tiene sus riesgos: sabemos que al atacar, vamos a dejar espacios. Hay que asumir ese riesgo para ser protagonistas. Y nosotros los delanteros y volantes debemos mejorar, tratar de ser un equipo más corto cuando perdemos la pelota y lo estamos trabajando día a día. Partido a partido se verá un Central mucho mejor".
Finalmente, elogió a Lucas Gamba, a quien asistió para el segundo gol: "Es un jugador fundamental para nosotros. Me hace el trabajo fácil, él genera con sus movimientos. Es el que más sprints hace por partido, pica todo el tiempo, no se cansa. Y para un jugador como yo, que juega de 10, es fundamental. Me da muchas variantes y para mí es fácil, jugar con él es sencillo".
