El ranking de impuestos que más impactan en la cadena de soja

Acsoja elaboró un proyecto de "radiografía" sobre las cargas tributarias en cada una de las etapas que conforman la cadena de la soja

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La Asociación de la Cadena de la Soja Argentina (Acsoja) presentó un proyecto de "radiografía" sobre las cargas tributarias en las etapas que conforman la cadena de la soja, elaborado junto a la Fundación Agropecuaria para el Desarrollo de Argentina (Fada). 

Los datos relevados corresponden al mes de junio de 2019, con una proyección a la situación actual y contempla los eslabones primario, comercial e industrial, para un modelo donde el grano de soja pasa por acopio, se procesa en la industria y se exporta en su totalidad.

"Frecuentemente Acsoja se ha manifestado en relación a la pesada carga tributaria que arrastra el cultivo de soja, en cada una de las etapas que conforman la cadena. Actualmente la situación tributaria plantea interrogantes en los futuros volúmenes de la producción, la comercialización y la industrialización del grano de soja", señalaron desde la entidad.

Según el informe, en el eslabón primario el impuesto a las ganancias es el de mayor peso, seguido en importancia por el impuesto inmobiliario rural. Entre ambos explican el 83% del total de impuestos, mientras que el 17% restante corresponde al impuesto a los créditos y débitos bancarios (ICDB), tributos sobre la mano de obra, ingresos brutos (IIBB), sellos y tasas municipales. En el actual esquema tributario, las DEX (derechos de exportación) son liquidadas por la industria e impactan directamente en el precio de venta del productor.

Analizados por destino, el estado nacional explica el 82% de la carga tributaria, un 15% es provincial y el restante 2%, municipal.  

En el eslabón comercial los tributos de mayor peso son los correspondiente a la mano de obra, seguidos por los impuestos transaccionales (ingresos brutos, ICDB y sellos),

En el eslabón industrial los derechos de exportación explican el 95,02% de los impuestos (descontándose del precio de venta al productor), siendo el 4,98% restante explicado por IIBB, ICDB, impuestos sobre la mano de obra, sellos y Derechos de Registro e Inspección (Drei).

Carga tributaria consolidada: la carga tributaria entre estos tres eslabones asciende a USD 150,21 por tonelada de soja; los derechos de exportación (DEX) explican el 66%, mientras que el otro 34% se distribuye entre el resto de los impuestos: 21% ganancias, 3% ICDB, 3% contribuciones y ART, 3% inmobiliario rural provincial, 2% impuesto a los sellos, 1% ingresos brutos y 1% tasas municipales.

Analizado por destino de la tributación, el 93% corresponde al estado nacional, seguido por el nivel provincial (6%) y por último el municipal (1%). 

Expresado en valores relativos, la recaudación de USD 150,21 por tonelada representaban en junio de 2019 un 67,89% del margen bruto de la cadena. Con la actual composición de los derechos de exportación del 33%, y manteniendo constante todos los demás valores, la carga tributaria por tonelada asciende a USD 165,49, representando los siguientes valores relativos: 74,19% medido sobre el margen bruto. 

"Como consecuencia de la alta carga tributaria, se ha desincentivado la producción, se ha generado un estancamiento del área sembrada y de la producción a través del tiempo", finaliza el informe.

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