La historia del emprendimiento que busca brindar soluciones innovadoras a las empresas desarrollando productos industriales se empezó a escribir cuando sus fundadores trabajaban juntos en una conocida empresa de la ciudad. Fue la pospandemia lo que materializó la idea y los hizo renunciar para dedicarse de lleno a un proyecto propio. Según describen los tres socios al frente de Irupé más diseño, son los únicos en Rosario en crear un estudio I+D de diseño interdisciplinario.  

“La decisión de lanzarnos se tomó porque vimos una oportunidad de mercado. Con la pandemia mucha gente quería fabricar productos pero no tenía idea como llevarlos al plano físico. Empezamos a juntarnos para resolver cada pedido que nos encargaban y la química fue total”, describe a Ecos365 Ignacio González, uno de los ideadores y agrega que la riqueza del grupo es tal que ya no se imaginan trabajando de forma individual. Su misión es diseñar productos que creen valor para las personas.  

Hasta consolidarse como equipo, cada uno fue cortando a su tiempo la relación de dependencia que tenían, dejando de lado unos cuantos años de antigüedad. Ahora, no cambian por nada la libertad de elegir qué proyectos toman y qué relación deciden construir con cada cliente a quienes tratan como socios. Vale destacar que su principal objetivo es hacer realidad ideas que permitan solucionar problemas, bajar costos y mejorar procesos sin pasar por alto la estética y la funcionalidad.  

“Si hacés lo que te gusta te tiene que ir bien. Así se enriquece tu mundo profesional y por ende personal. La estabilidad no existe en ningún lado, así que hay que dejar fluir y confiar en uno. Vivimos de esto y creo que la fórmula del éxito radica ahí”, reflexiona Marcelo González, cofunder de la propuesta hoy requerida desde los rubros más diversos. Buscan sus servicios y asesoría pymes de consumo masivo, fábricas, frigoríficos y cuánto más variada es la gama mayor es el desafío.   

El ADN del emprendimiento 

Si bien todos hacen todo y así se nutre el espacio, cada miembro se luce en una rama específica del diseño por su trayectoria y formación. Ignacio es ingeniero mecánico y se da más con los fierros. Está detrás de los materiales y en la fabricación de máquinas si el proceso lo requiere. Marcelo es diseñador equipacional, ilustrador y creativo. Estudió bellas artes, estuvo 15 años en su anterior trabajo como jefe y hoy se enfoca en cada etapa del diseño. Por último, Félix Usellini, es diseñador industrial UX/UI, está abocado a la parte más blanda, creativa, de investigación, del dibujo digital y renders.  

“Nuestro estudio es I +D e interdisciplinario porque abarca el proceso de investigación de mercado previo y el asesoramiento desde la idea hasta su realización. Analizamos la parte comercial, estética, funcional y la seguridad en cada diseño”, detallan. En cuanto a la metodología de trabajo, cada proyecto lo encaran de acuerdo a la necesidad del cliente. Primero interpretan qué busca. Luego dibujan la propuesta y lo presentan de forma digital para su aprobación. Le sigue la fase de ensayos donde se realizan maquetas y prototipos hasta llegar al producto terminado. 

En cuanto a la identidad de la marca, la elección del nombre y el slogan refleja que cada detalla fue pensado para estampar el sello local. “Nos representa el río, el aire libre y nos interesaba mostrar un estilo propio con la impronta de la región que habitamos. Bajo esa premisa armamos la página, el logo y generamos todo el contenido en español”, explican los emprendedores y agregan que en el corto plazo van a sacar una línea de productos propios de equipamiento de oficina, accesorios para camping y bicicletas. 

No obstante, el trío rosarino tiene otros planes todavía más ambiciosos para seguir creciendo. Primero, van a buscar incorporar nuevos partner para trabajar codo a codo. Segundo, van a presentar su producto destacado en el Sello del Buen Diseño y en tercer lugar, pero no menos importante, se van a meter a fondo en un nicho clave.  

“Para muchas empresas que fabrican lo que hay hoy mañana no se sabe y la idea es hacer sustitución de importaciones, en un escenario complejo”, profundiza Félix. Para concluir, destaca que la fortaleza de llevar la creatividad al extremo, aún con mínimos recursos y brindando soluciones prácticas es la cualidad que los define y por la que los diseñadores e ingenieros argentinos son de los más valorados en el exterior.