Numerosas investigaciones han demostrado que el estrés es uno de los principales padecimientos de la población mundial, con efectos negativos en el organismo de las personas y en su rendimiento. Por eso es que grandes multinacionales hace tiempo que buscan la manera de que sus empleados estén más relajados en sus ámbitos laborales, tendencia que ya empezó a trasladarse a las pymes. Tres diseñadores santafesinos pensaron en una solución práctica para satisfacer esa necesidad y diseñaron una cabina de meditación y relajación pensada precisamente para esos ámbitos.

“Trabajamos sobre el diseño de experiencias y descubrimos que en todo el mundo no hay muchos antecedentes de dispositivos específicos para combatir el estrés, pese a que es una de las molestias más grandes de la gente”, dijo Jorge Giovino, uno de los integrantes de Estudio Chango junto a Claudio Wingeyer y Mariano Baker, diseñadores industriales que crearon "Pausa".

Los tres jóvenes emprendedores empezaron a pensar de qué manera hacerle frente a esto, y surgió la idea de diseñar un espacio específico de relajación. “Vimos que Google, Amazon, y otras multinacionales ya tenían espacios para hacer ejercicios de relajación y yoga con clases, pero que no había nada para que el empleado por sí mismo pudiera tomarse un descanso, una pausa activa, para hacer esos ejercicios. Caímos en Calm que es la app más conocida al respecto, pensamos en un lugar físico para poder relajarse y salió la idea de la cabina”, manifestó Giovino a Ecos365.

El primer prototipo de la cabina fue hecho en tiempo récord para ser presentado en una feria capitalina el año pasado, y trabaja con un sistema de olores, en donde el usuario puede elegir el más agradable, para practicar aromaterapia. “Además cada uno puede ver una serie de visualizaciones, escuchar audios, aclimatarse con luces y recibir otro tipos de estímulos sensoriales que ayuden a la relajación”, detalló.

La cabina está construida en el exterior con madera fenólico, en el interior cuenta con paneles acústicos, piso acolchado, asiento forrado de tela, dispone de sistema de ventilación con coolers, panel de control con tablets, además del sistema de aromaterapia y bluetooth para el audio, entre otros ítems. El objetivo es crear un clima que facilite la realización de ejercicios de respiraciones, imprescindibles para la meditación.

“Hubo mucha repercusión cuando presentamos la cabina y una empresa de comunicación y marketing nos bancó la financiación para desarrollarla, con la condición de que empiece a probarse allí mismo”, señaló el diseñador. La idea es que los empleados de la compañía, y otros invitados, puedan probarla para chequear el funcionamiento y recibir el feedback necesario para mejorar la tecnología y el diseño.

La joven firma ya había sido preincubada en el gabinete de emprendedores en la Facultad de Diseño Industrial (FADU) de la Universidad Nacional del Litoral (UNL) desde diciembre de 2020. Tras recibir una serie de capacitaciones en planes de negocio, actualmente trabaja en conjunto en la mejora continua del producto y de la experiencia de uso para llegar a un MVP más chico, económico y simple que facilite su comercialización, mantenimiento y servicio de post venta. La idea es que pueda ser instalado en pymes que no tengan tanto espacio disponible como una gran empresa, spa, aeropuertos, hoteles, universidades, entre otros espacios.

“La cabina no es costosa para una empresa si se considera que los ejercicios duran entre 10 y 15 minutos, y que en una jornada de 8 horas pueden usarla unas 25 personas, pero apuntamos a mejorar todavía más el prototipo”, expresó el diseñador y agregó que el próximo desafió es participar en el Concurso JIJE 2021 que organiza la UNL para buscar inversores o empresas de tecnología que quieran sumarse al proyecto y de esta manera poder escalar la producción.