Cacho Garay se presentó en la Estación Transitoria de Detenidos y Aprehendidos de Mendoza para declarar y habló con los medios sobre la causa por violencia de género que le inició su exmujer, Verónica Macías: Yo creo que si ella tuviera la posibilidad de pegarme un escopetazo por la espalda, lo haría. Es un ensañamiento", dijo el humorista. 

“Con esta farsa, además de dañar a muchísima gente, destruyó la fuente de trabajo de 36 personas. Ella ha tomado posesión de propiedades que eran mías", agregó.

Además, aseguró que tiene pruebas para demostrar que su ex no estaba privada de su libertad, tal como argumenta: “Ella visitaba permanentemente a su familia en Córdoba, tenemos cómo acreditarlo. Dice que estaba privada de su libertad, pero tenemos una gran cantidad de tickets aéreos de los vuelos que hacía”.

Luego, aseguró: "Me siento traicionado, porque fue un cambio increíble. Ella vino a mi casa de sorpresa para un cumpleaños y nunca más se fue".

Para finalizar, el cómico negó la existencia de la supuesta pelea que protagonizó en un hotel: “Eso no sucedió, desde la gerencia del hotel emitieron un comunicado donde aclarar que nada de eso había ocurrido”.

Este martes por la tarde, Verónica Macías, hizo un sentido descargo en sus historias de Instagram y se mostró indignada por el tratamiento de su caso en la Justicia.

"¿Qué tiene que pasar para que esto se termine? ¿Qué tiene que pasar para que la Justicia deje de defender a los violadores y torturadores? ¿Qué tiene que pasar? ¿Se tienen que seguir muriendo mujeres? ¿Me tienen que matar?”, disparó con la voz entrecortada.