El concejal Ariel Cozzoni promueve una iniciativa para los jubilados y pensionados al momento de la renovación de la licencia nacional de conducir. Concretamente, se pide que las personas mayores que cobren haberes equivalentes hasta dos jubilaciones y/o pensiones mínimas (28 mil pesos) queden eximidos del pago de la totalidad de los aranceles cuando renueven su carnet.

“Entendemos sobre la necesidad de sancionar normas que establezcan beneficios para las jubilados y pensionados de bajos ingresos que habitan en Rosario, a fin de posibilitarles en forma segura accesibilidad a los servicios y una mayor protección para el ejercicio de sus derechos”, señaló Cozzoni.

De acuerdo a las estadísticas más recientes, en Rosario habitan aproximadamente 199 mil personas de más de 60 años lo que constituye el 16,65 % del total poblacional y en la franja de 60 a 75 años son alrededor de 140 mil.

El costo del arancel que se debe abonar para renovar la licencia es de 1.451,60 pesos si corresponde por un año y de 1.551,60 pesos si lo es por dos años, lo que varía de acuerdo a la edad del conductor. A ello debe agregarse la suma de 320 pesos por el costo del certificado del Centro Nacional de Antecedentes de Tránsito (Cenat).

Para el edil, “es mandato constitucional promover medidas de acción positiva que garanticen la igualdad real de oportunidades y de trato y el pleno goce y ejercicio de los derechos a los ancianos”.