Rosario selló el primer brote de coronavirus con 96 casos recuperados desde el inicio de la pandemia en la ciudad, el 5 de marzo pasado. La mitad de esos contagiados (49 personas) corresponde al Distrito Centro. El 75 por ciento viajó al exterior o tuvo un contacto estrecho. En cambio, solo el 5,8 por ciento se infectó por circulación comunitaria.

El secretario de Salud municipal, Leonardo Caruana, afirmó a Rosario3 que se dio “una evolución favorable del primer brote: fue un número bajo de contagios en relación a que no tuvimos picos o crecimiento exagerado de casos alrededor de cada uno de los confirmados”.

En ese sentido, resaltó el trabajo integral del área de Salud y Desarrollo social que excedió a la primera etapa sanitaria, es decir aumentar las camas disponibles, crear centros de aislamiento y preparar los equipos en los hospitales. Caruana remarcó la presencia en el territorio que permitió "identificar a los enfermos y aislar a los sospechosos de inmediato". 

“También fue importante el protocolo en geriátricos, cuidar a los adultos mayores con vacunaciones a domicilio y llevarles medicación crónica para que no salgan de sus casas”, valoró.

Sin embargo, el secretario de Salud aclaró: “Rosario no le ganó al coronavirus. Hay que ser prudentes y moderados en esto. Estamos en una etapa distinta, en un ciclo de cuatro o cinco días sin nuevos casos pero con más movimiento en la ciudad. Por eso hay que respetar los protocolos”.

“La verdad es que no sabemos el final de esta historia. Existen diferentes modos de presentarse en las distintas regiones y esta pandemia ha puesto en crisis los modelos predictivos. No se pueden extrapolar los estudios y conclusiones de otros lugares”, dijo y anticipó: “La primera etapa fue muy intensa, con mucha angustia y tensiones, pero ahora hay que sostener. Eso será clave para poder controlar eventuales nuevos casos como hasta ahora”.

Mayoría de personas entre 30 y 59 años

 

Según el estudio de la Secretaría de la Salud de la Municipalidad de Rosario, la caracterización por edad y género de los 96 recuperados indica que 49 personas eran mujeres y 47 personas eran varones.

Además, 49 pacientes que estuvieron afectados tienen entre 30 y 59 años; 27 son de la franja de entre 18 y 29 años; 17, entre 60 y 80 años; y solo tres son menores de 18 años.

“El mayor contagio se dio en jóvenes pero los que tuvieron mayor complicación son adultos mayores”, precisó Caruana.

En la distribución por distritos, prevalece el Centro con 49 personas (el 51 por ciento). Le siguen: 17 pacientes residentes en el distrito Sur, 15 del Norte, y cinco en cada uno de los tres restantes (Noroeste, Oeste y Sudoeste).

Sin propagación masiva en villas

 

A diferencia de lo que ocurrió en algunos barrios populares de Ciudad de Buenos Aires o en Villa Azul de provincia, por ejemplo, el funcionario local dijo que “parte de nuestra fortaleza es la presencia territorial, con alerta temprana y acompañamiento de los equipos”.

“Ese permitió atender el caso confirmado además del aislamiento de los sospechosos. Trabajar la pandemia desde todos los eslabones de la red, no solo mirando camas y hospitales. Eso hicimos por ejemplo en Empalme, en dos manzanas alrededor de un caso confirmado. Eso se puede hacer por una presencia previa del Estado, con equipos, que no se puede lograr en medio de la emergencia”, aseguró.

Sin embargo, aclaró: “Sabemos que tenemos que seguir sin exitismo porque la realidad es compleja en la Argentina. Hay circulación comunitaria intensa en Capital Federal y provincia de Buenos Aires, y no estamos ajenos a esa realidad”.

Caruana resaltó que “en el momento que estamos la relación con el Amba y otras provincias donde hay circulación del virus y la conectividad con otros mercados, abre una etapa de mucho cuidado, de mirar en profundidad las actividades que generan contacto con personas que vienen de esos distritos”.

De hecho, fuera de ese grupo de recuperados, está la única persona fallecida, el cónsul chileno en la ciudad, y los últimos 14 enfermos en las dos semanas pasadas, que se contagiaron a través de personas con antecedentes de viaje a Buenos Aires. En total, la ciudad tiene 113 casos (este sábado no sumó contagios).

Fuente de contagio y síntomas previos

 

De esos 96 casos recuperados considerados el primer brote de Rosario, el 44,8% tiene antecedentes de viajes a Brasil, España, Colombia, Estados Unidos y Reino Unido, entre otros. El 29,2% fue por contactos estrechos. El 20,8% corresponde a trabajadores de la salud. El 5,2% fue por circulación comunitaria.

Según dependencia del efector, los casos confirmados se dividen: un 65,3% en el sector público y 34,7%, en el privado.

Por otro lado, los pacientes tuvieron uno más de los siguientes signos o síntomas:

El 81,2% presentó fiebre de 38° o más
El 58,3%, tos
El 42,7%, malestar general
El 39,6% cefalea
El 36,5%, dolor de garganta
El 22,9%, artralgia
El 17,7%, odinofagia

De los 96 casos, 35 presentaron comorbilidades:

El 32,4% por hipertensión arterial
El 17,6%, diabetes
El 14,7%, obesidad
El 17,6%, asma
El 11,8%, insuficiencia cardíaca
El 8,8%, fumadores