La remolacha es un alimento que no solo se destaca por su sabor y su color, sino también por sus beneficios. No solo reduce la presión arterial en la población adulta, siendo beneficiosa para el corazón, sino que además el jugo o esencia de esta verdura puede mejorar el funcionamiento del cerebro, según un estudio de la Universidad Wake Forest en Winston Salem (Estados Unidos).
Además de ser fuente de vitamina C, potasio y ácido fólico, es rica en fósforo y proporciona una baja cantidad de calorías al organismo, sin mencionar su contenido en vitamina B1, B2, B3 y B6, y minerales como el hierro y el yodo.
Esta hortaliza baja en grasas es rica en fibra, tiene un alto contenido en vitaminas del grupo B y también contiene vitaminas A y C, carotenoides y minerales como calcio, magnesio, fósforo, potasio, sodio, zinc y cobre.
De acuerdo con la investigación estadounidense, la remolacha es una hortaliza ideal para la salud del corazón, ya que contiene antioxidantes, estimula el bienestar cardiovascular, ayuda a limpiar la sangre y mejora el funcionamiento de los vasos sanguíneos.
A su vez, ayuda a mejorar la memoria, ya que su jugo favorece el flujo sanguíneo cerebral y estimula la zona del cerebro encargada de los procesos cognitivos. Al mismo tiempo, gracias a su elevado contenido vitamínico y al ácido fólico, aumenta las defensas y, por ende, potencia el sistema inmunológico.
Entre otras cosas, la remolacha aporta energía debido a su composición elevada de fibra, carbohidratos, vitaminas y minerales. Además, suma muy pocas calorías: por cada 100 gramos de alimento añade 43 kcal y 1,6 proteínas.
Más beneficios de la remolacha, según el estudio
Para elaborar el estudio se contó con la participación de 26 voluntarios de 55 años o más con presión arterial alta. Ninguno de ellos practicaba ejercicio en forma regular y todos consumían hasta dos medicamentos para ayudar a reducirla.
En cuanto a la metodología, lo que hicieron fue practicar 50 minutos de actividad física tres veces por semana durante más de un mes. Una hora antes de cada sesión, la mitad de los participantes tomaba un suplemento de jugo de remolacha con 560 miligramos de nitratos, mientras que los restantes consumían un placebo.
Los resultados mostraron que quienes lo consumieron antes de realizar movimientos de moderada intensidad tuvieron una mayor conectividad en las regiones del cerebro asociadas a la función motora, en comparación con aquellos que no lo habían tomado.
En adultos más jóvenes, por otro lado, los beneficios se dan por el gran contenido de nitratos que tiene el jugo. Una vez que estos nitratos se ingieren, se convierten en óxido nítrico, que disminuye la presión arterial y aumenta el flujo sanguíneo al cerebro.
