Una mujer italiana se vio obligada a quedarse encerrada durante 24 horas en su casa con el cadáver de su marido, quien murió el pasado lunes con coronavirus.

El hecho ocurrió en el pequeño municipio de Borghetto Santo Spirito en Savona, al norte del país, donde agentes descartaron entrar en la vivienda luego de que el hombre, de 76 años, falleciera dado que la esposa es considerada como un potencial caso de contagio, según informó Ansa.it.

Como medida de prevención, las autoridades obligaron a la mujer a permanecer en su casa, donde estaba tendido el cuerpo de su marido boca abajo en el suelo de una habitación.

El alcalde de la localidad, Giancarlo Canepa, confirmó a CNN lo sucedido y lamentó que nadie pueda entrar a consolar y ayudar a la mujer, aunque explicó que las autoridades están obligadas a cumplir el protocolo establecido.