El presidente de la Corte Suprema de Justicia de la Nación, Horacio Rosatti, volvió a poner en el centro del debate la integración del máximo tribunal y reclamó que se cubran las vacantes para volver a una conformación de cinco jueces. Aun así, remarcó que, pese a trabajar “al límite”, la Corte cerrará el año con un volumen récord de fallos.
“En la Corte ahora somos tres pero deberíamos ser cinco. Estamos jugando un partido de fútbol de 11 con siete jugadores. Se nos complica irnos de vacaciones”, graficó el magistrado, al describir la sobrecarga de trabajo que afronta el tribunal. Según precisó, actualmente hay acuerdos todas las semanas y el 98% de las decisiones se firman por unanimidad.
Las entrevistas a Rosatti son lo más aburrido que da el periodismo de hoy. pic.twitter.com/udDeZL1ZqC— Sebastián Lacunza (@sebalacunza) December 16, 2025
Las definiciones fueron realizadas durante una entrevista televisiva con Carlos Pagni en el programa Odisea Argentina, que se emite por la señal LN+, donde Rosatti profundizó sus críticas al esquema actual y defendió la necesidad de completar la integración del cuerpo.
En ese marco, sostuvo que una Corte de cinco miembros es la conformación “ideal” y recordó que se trata del número histórico. “Con cinco, la mayoría es tres y todos intervienen. Con tres es difícil compatibilizar la redacción y el trabajo cotidiano”, explicó, al tiempo que subrayó que la selección de nuevos jueces implica una alta responsabilidad por la calidad de los candidatos.
Rosatti también planteó que el tribunal debería concentrarse en temas estrictamente constitucionales, para evitar convertirse en una suerte de tercera instancia judicial. “Eso implicaría más casación, con criterios uniformes, y que nosotros revisemos esos criterios una sola vez”, señaló.
Al comparar el funcionamiento con la Corte Suprema de Estados Unidos, indicó que allí se tratan menos de 100 sentencias por año y lo atribuyó a “una sociología distinta”. “Ellos se sientan antes a definir qué temas van a tratar. En cambio, el abogado argentino es muy astuto”, deslizó.
En otro tramo, el presidente del máximo tribunal se refirió a la relación entre la Justicia y la política. Afirmó que el Poder Judicial es, por diseño, el más conservador de los tres poderes y que eso suele generar tensiones. “El político quiere cambios rápidos porque fue elegido; el juez debe verificar si todo es compatible con la Constitución. Ese cortocircuito es inexorable”, sostuvo.
Rosatti también habló sobre el narcotráfico y aseguró que en los últimos dos años comenzaron a llegar nuevamente causas a la Corte. Según detalló, se convalidaron más de 100 condenas. “Me gusta que se ponga el reflector. La situación ha mejorado”, afirmó.
Por último, se refirió al nivel de confianza social en la Corte Suprema, que reconoció históricamente bajo en todos los países, pero consideró “verosímil” su reciente crecimiento. “La Justicia tiene otros tiempos y procedimientos, es más lenta. Lo alentador es que hay una capacidad autodepuradora, con sanciones y renuncias ante malos ejemplos”, concluyó.



