Un chino fue operado a finales del pasado mes en un centro médico de la provincia de Guangdong, donde le extirparon de su cerebro un parásito vivo de doce centímetros de largo. El gusano se alimentó de sus tejidos durante quince años. Aparentemente, todo se inició por comer caracoles que no estaban bien cocidos.

Según publicó Russia Today, el neurocirujano Gu Youming, quien dirigió la operación que duró más de dos horas, explicó que si no extraían el parásito, la tenia habría seguido comiendo la masa cerebral del hombre, lo que podría haber producido parálisis o la muerte.

Gu Youming indicó que todo se inició cuando el hombre ingirió caracoles o carne exótica que no tenían una buena cocción.

El paciente señaló que en 2004 solía comer caracoles de río fritos. Agregó que un año después comenzó a sentir náuseas, pinchazos en los brazos y piernas y convulsiones. El año pasado le diagnosticaron infección parasitaria.