La escuela Crisol reabrió este martes sus puertas luego de sufrir durante un fin de semana un ataque a balazos. Por el hecho, las autoridades de la institución acordaron con el Ministerio de Educación reducir el horario de clases retrasando el inicio de la jornada educativa 40 minutos.

“Hoy retomamos las clases en un estado de nerviosismo, de ansiedad, de angustia. Hemos tenido una catarata de papás preguntándonos cómo estaba las situación porque tenían miedo de mandar a los chicos, de hecho vinieron muchos menos de los que generalmente asisten”, reveló en AM-PM (Radio 2) el director de la escuela, Guillermo Arnold.

Entre las medidas acordadas para garantizar el regreso a clases, la provincia dispuso una custodia policial en la puerta de la institución y el cambio de horario. “Hoy abrimos 8.30, esto es uno de los acuerdos que tenemos con el Ministerio para que los chicos entren un poquito más tarde cuando ya estén los negocios activos y más gente en la calle”, añadió.

Con respecto a la presencia policial, desde la comunidad educativa confirmaron a Cada Día (El Tres) que hay incertidumbre sobre el tiempo que se mantendrá el patrullero en el ingreso. “La presencia policial es lo que más preocupación genera entre los padres, una mamá me dijo que si no estaba el móvil no volvía a mandar a su hijo”, reconoció una de las directivas.

“Desde el Ministerio tuvimos el apoyo, pero no creo que el Estado haya tomado conciencia de lo que pasó, porque acá tendría que haber algo de más peso político apoyando para que la escuela siga abierta. En eso estamos un poquito relegados y lo que solicitamos puntualmente es que nos mantengan la custodia hasta mediados de diciembre”, concluyó Arnold.