La inauguración de una obra, por más chica que sea, o la entrega de equipos o recursos suelen estar acompañados por un acto institucional en donde las autoridades aprovechan para mostrar su gestión, definir políticas o prometer accciones. En Helvecia pasó todo lo contrario.

La localidad que es cabecera del departamento Garay, a unos 90 kilómetros hacia el noreste de la ciudad de Santa Fe, recibió del gobierno provincial cuatro patrulleros para la Policía, un aporte que para la fuerza local no es nada menor, pero no participó ni un solo funcionario.

A las autoridades y referentes locales les llamó la atención la especie de “no acto” y la imagen poco frecuente: las flamantes cuatro camionetas solitarias frente a la Unidad Regional VII.

El episodio se registró en esta semana de tensiones por las declaraciones del ministro de Seguridad Marcelo Sain hacia la Policía que conduce: “Lo único que sabe hacer la Policía de Santa Fe es salir al tun-tun y quejarse”.

Según informó a Rosario3 el periodista de Helvecia Adrián Monzón, las autoridades locales prácticamente no se enteraron de la entrega de los móviles y se vieron sorprendidos por la falta de notificación.

Fuentes de la Unidad Regional VII deslizaron que desde el Ministerio de Seguridad les pidieron un acto interno y chico, y no les permitieron invitar a nadie. El hecho contrasta con la amplia difusión que se le dio, por ejemplo, a la entrega de móviles en Rosario y que suele ser la norma en la política doméstica.