Laboratorios de Rosario y la región comenzaron a recortar prestaciones a causa de los aumentos en los costos y la falta de insumos que no están ingresando al país, por lo que se encuentran en fase de negociación con prepagas y obras sociales, algunas de las cuales dejaron de atender. Además, hay demora en la entrega de resultados de análisis.

Así lo expuso en Radio 2 la presidenta del Colegio de Bioquímicos de la Provincia de Santa Fe Segunda Circunscripción, Sandra Álvarez, que habló de una “unidad ética mínima” establecida para brindar el servicio.

“Tenemos el problema de la prestación por un lado, y por otro la unidad bioquímica que no está actualizada. Hace bastante tiempo no se actualiza. Es decir, si tenés un hemograma, tendrás tres o cuatro unidades bioquímicas. Es lo que hay que charlar con las obras sociales para los contratos”, señaló en el programa La primera de la tarde.

Ante esto, señaló, se determinó lo que se llama “unidad bioquímica ética mínima, para solventar un poquito más y con eso ir a luchar a las obras sociales”.

En cuanto a los faltantes, dijo Álvarez, “el problema son el instrumental y los reactivos, que la mayoría son importados”. Explicó que “acá hay un laboratorio que los fabrica pero muchas veces no le llega alguna enzima o algo necesario para ese instrumento”.

“Estamos viendo cómo se puede sacar esa traba a los insumos que no entran al país, principalmente los reactivos, para seguir trabajando como siempre. Calculo que los primeros días de octubre vamos a tener repetidas reuniones, no sólo acá en la segunda circunscripción (del Colegio profesional) sino también en la primera, para ver qué se hace y hablar con la ministra de salud”, adelantó.

En tanto, manifestó que “con las obras sociales hay que hacer un convenio” ya que en algunos casos, “una parte lo cubre (la prestadora) y la otra la paga el afiliado”, como sucede con la compra de medicamentos.

En otro orden, por todo esto se presenta una demora significativa para obtener los resultados de muchos análisis porque los laboratorios necesitan optimizar el rendimiento de cada insumo que tengan en existencia y ante esto, entregas que solían demorar 24 o 48 horas se extienden a una semana o diez días.

“Somos eslabones de una gran cadena y en el centro está el paciente y el médico esperando el resultado”, lamentó la presidenta del Colegio de Bioquímicos.