Javier Milei reapareció este lunes en público luego de vetar las leyes aprobadas en el Congreso que buscaban mejorar los haberes jubilatorios, recomponer la moratoria previsional y declarar la emergencia en discapacidad. Fue en la cena anual de la Fundación Faro, que dirige Agustín Laje y que funciona como espacio de recaudación para la campaña de La Libertad Avanza a través de aportes de empresarios aliados al gobierno. El presidente defendió sus políticas, aseguró que su gobierno es “el mejor de la historia” y observó que si tantas personas no llegaran a fin de mes "la calle tendría que estar llena de cadáveres". Se propuso "no insultar más" y desafió a "discutir ideas".
En su discurso, Milei planteó que “la gran gesta para cambiar la Argentina tiene tres frentes de batalla indispensables”. “El frente de la gestión, el frente de la política y la batalla cultural”, sostuvo.
“Nosotros asumimos con la peor herencia de la historia de la Argentina. Combinábamos una crisis peor que la de 1975, un balance del Banco Central peor que el que tenía Alfonsín e indicadores sociales que eran peores que los del 2001”, sintetizó.
Frente a las críticas por la pérdida del poder adquisitivo, dijo: “A veces parece que se olvidaran de dónde venimos: salarios de 300 dólares y ahora son de 1.100 dólares. Y entonces ahora vienen a decir: «No, no se llega a fin de mes». Convengamos que, si fuera cierto, ustedes tendrían que caminar por la calle y tendría que estar llena de cadáveres. Es un insulto a quienes obviamente hacen un gran esfuerzo”.
En ese mismo tono, agregó: “Si es necesario vamos a tener que seguir repitiendo, porque los kukas parece que nos hubieran dejado en Suiza y nosotros generamos una masacre, cuando en realidad los que destruyeron y se consumieron el capital empobreciendo a la gente fueron ellos”.
En otra parte del discurso, Milei se definió a sí mismo como el líder del “mejor gobierno de la historia”, superando al de Menem que, según destacó, era hasta este momento el mejor. “La reforma -de este gobierno- es 28 veces más grande que la que hizo Menem. Y si la tomamos por articulado, es una reforma 80 veces más grande que la que hizo Menem. Es decir, hicimos más de 8000 reformas estructurales en un año y medio”, aseveró.
Durante el evento, también cargó contra la noción de justicia social, a la que calificó como “un primer ejemplo de parásito mental”. Y explicó: “De justicia social no tiene nada, dado que parte de la injusticia de arrebatarle a uno por fuerza, para darle a otro. Es decir, le roba el trabajo a una persona para repartirlo arbitrariamente”.
Con respecto a sus modos y las críticas que recibe por los mismos, Milei sostuvo: "Voy a hacer esto: voy a dejar de usar insultos a ver si están en condiciones de poder discutir ideas. Porque yo creo que discuten las formas porque carecen de nivel intelectual suficiente para discutir las ideas".
"Igual quiero hacer una nota de color: había un señor que fue presidente que era un insultador serial, le decían «El Loco» y fue el que transformó la educación Argentina. El señor se llamaba Domingo Faustino Sarmiento. Según este conjunto de abanderados y exquisitos de la formas, lo hubieran directamente condenado a la hoguera. Pero bueno es así la dictadura de las formas, vamos a enfrentarlos respetándoles sus formas, así de una vez por todas a ver si muestran tener nivel intelectual para poder darnos la batalla en las ideas. Vamos a usar las formas que a ustedes les gustan. ¿Saben para qué? Para que queden en evidencia que son una cáscara vacía", sentenció.
Por último, apuntó nuevamente contra el kirchnerismo: “Lo que hicieron con el país y con la provincia, habla a rabiar, han destruido todo lo que han tocado. Es decir, algo así como el rey Midas todo lo que tocaba lo convertía en oro, estos todo lo que tocan lo convierten en, excremento”.



