Familiares de personas internadas en el Sanatorio Rosendo García denunciaron que el edificio se quedó sin agua y tuvieron que comprar bidones de manera particular para higienizar a los pacientes.

“Ayer, después del mediodía nos quedamos sin agua en la habitación. Compramos bidones para poder higienizar a los internados. Tratamos de no usar el baño, pero es imposible", explicó en La Primera de la Tarde (Radio 2), Maira, familiar de una mujer internada.

"Este piso está completo. Son 20 habitaciones y hay dos pacientes por habitación. Más acompañantes", agregó la denunciante.

En el mismo sentido, expresó: "Nos llama la atención, que tratándose de una institución de salud, no pidan ayuda externa".

A los pocos minutos de realizada la denuncia pública, la secretaria de Control y Convivencia, Carolina Labayru, fue consultada por el periodista Sergio Roulier al respecto y aseguró que ya estaban trabajando en el tema.

“Los inspectores labraron el acta correspondiente, mandamos la cuba de la Municipalidad para llenarles la cisterna porque se les rompió una bomba, la reemplazaron y no llegó a cargar todo el tanque”, explicó la funcionaria.